José Corbacho y Juan Cruz han comenzado a rodar Cobardes, su segunda película. Después del éxito cosechado con su primer trabajo cinematográfico, la comedia Tapas, Corbacho y Cruz cambian de registro para hablar del acoso escolar o bullying a través de un chico de 14 años que sufre el asedio de sus compañeros de instituto, además de los miedos propios de los adultos ante problemas como la inestabilidad laboral, la prepotencia de los jefes en el trabajo, la inseguridad o la incertidumbre de lo que pasará con su vida. La película, cuyas primeras tomas se realizaron en un instituto de enseñanza media de Hospitalet de Llobregat (Barcelona), cuenta con un reparto de actores consagrados en el mundo del cine y del teatro. Junto a profesionales como Lluís Homar, Paz Padilla, Elvira Mínguez o Antonio de la Torre, cuatro adolescentes desempeñan también papeles protagonistas: Eduardo Espinilla, Eduardo Garé, Ariadna Gaya y Javier Bódalo, quien dará vida a Gaby, el hijo de 14 años de Merche y Joaquín (Padilla y Homar), que tiene miedo de ir al colegio por culpa de un compañero de clase que le acosa y que, por su parte, tiene a su vez miedo de defraudar a su padre. Pero en la película los miedos no serán exclusivos de los adolescentes, sino que los padres también temerán enfrentarse a la vida, a perder su trabajo, y a que la familia se desmorone. Enfrentarse al miedo Corbacho señaló que la intención de la película, lejos de ofrecer enseñanzas moralizantes o tan sólo hablar del acoso escolar, es la de utilizar este fenómeno como «un pretexto, el punto de partida que permite hablar del miedo que sentimos todos, niños, jóvenes y adultos, a enfrentarnos a la propia vida en nuestra sociedad».