Fue concursante de «Gran Hermano» y murió en su residencia de Essex a causa de un cáncer cervical
23 mar 2009 . Actualizado a las 02:00 h.Jade Goody, la ex concursante del Gran Hermano británico, famosa por su desparpajo y por haber vendido a los medios de comunicación los detalles de su lucha contra la enfermedad, su boda y el bautizo de sus hijos, falleció a consecuencia del cáncer cervical que padecía desde el 2008, según anunció un portavoz de su familia. Goody, de 27 años, murió en la madrugada del domingo en su residencia de Essex, al sureste de Inglaterra. Con su fallecimiento, Goody pone fin a su más íntimo y aplaudido reality show , el de su propia vida.
La que fue enfermera, de padre toxicómano (también lo fue su madre), ex convicto y que abandonó a su familia, con apenas cultura general (fue muy sonado cuando, durante la tercera entrega de Gran Hermano , preguntó quién era Río de Janeiro), nunca supuso que se convertiría, con el paso del tiempo y su muerte prematura, en uno de los símbolos más poderosos de la televisión británica. Goody es la componente de GH más popular de todos los tiempos y, aunque en un principio fue objeto de la tirria de los medios de comunicación impresos por sus insultos racistas a otros compañeros y sus maneras arrogantes y escandalosas, logró imponerse en los últimos meses de su vida como una de las figuras más populares del panorama televisivo británico.
Esta londinense a la que el propio primer ministro británico, Gordon Brown, calificaba ayer de «mujer valiente en la vida y en la muerte», logró en seis años -desde que entró en la casa con 21 años- una fortuna de unos 2,2 millones de euros.
Goody ha dejado un reality show póstumo, su funeral, que como ella, será espontáneo, impredecible, chabacano y sobre todo muy televisivo. «Ella quería que fuera una gran celebración», dijo ayer Max Clifford, portavoz de la familia.