David Cantero: de currante a presentador estrella

miguel anxo fernández

TELEVISIÓN

18 abr 2011 . Actualizado a las 17:46 h.

Recuerda con envidiable claridad que fue con 8 años cuando le entró el gusanillo de la televisión, y ya no paró hasta vincularse al medio. David Cantero, madrileño, 50 tacos, lo atribuye a una visita escolar a Prado del Rey. Fue en 1982 cuando regresó allí para integrarse en Televisión Española.

Quince años de currante, cámara al hombro (léase también reportero y montador), lo curtieron para avanzar hasta lo que ahora es: presentador estrella. Le vieron buena planta y, sobre todo, fotogenia y voz adecuada para dar el paso desde detrás de la cámara y ponerse ante el objetivo. Primero se paseó por los informativos del centro territorial de Andalucía. Eso fue entre los años 1997 y 1999. Después regresó a Madrid y hasta el 2004 se maceró en las bodegas del Canal 24 Horas, etapa de la que admite guardar un recuerdo estresante.

A continuación llegó el Telediario del fin de semana en La Primera, que lo consolidó ante la audiencia como un tipo con carisma, de ahí que la privada Telecinco le echara el guante en septiembre del año pasado para hacerse cargo del informativo de Telecinco de la sobremesa y competir en la distancia corta con Antena 3 Noticias 1, aunque el objetivo a batir sea su antigua compañera en TVE, Ana Blanco, lideresa incuestionable, que le saca una media de 700.000 espectadores con su Telediario 1.

El fichaje nos pilló a todos con el paso cambiado por la consolidación de David Cantero como parte icónica de la televisión pública. Poderoso caballero es don dinero.

Luce cara de guapo, coronada por cabello tan gris como canoso. Cantero tiene su parroquia principal entre las féminas, pero va más allá del presentador a palo seco por su condición de pintor (aunque lo sea casi en la intimidad) y de escritor de ficción con Amantea (2005) y El hombre de baobab (2009).