Teresa y Lluc fueron repescados por el programa tras hacer los mejores crepes de la prueba en Sevilla
21 ene 2015 . Actualizado a las 11:30 h.El sueño termina aquí, gracias a todos, sois geniales.Como quiero a todos mis compañeros, que gane el mejor!!#MCJunior #sempreGalicia
— AnaMCJ2 (@AnaMCJ2) enero 20, 2015
Al de Barcelona le dieron una nueva oportunidad al principio del programa que acabó convertida en alegría fugaz. Nueve exaspirantes compitieron en la Plaza de España de Sevilla por hacerse de nuevo con el delantal, un reto que superaron finalmente Teresa y Lluc, ambos de 9 años de edad. «Habéis trabajado más organizados y concentrados que nunca -les halagó Samantha-. Merecéis estos delantales». A diferencia del pequeño, Teresa supo aprovechar al máximo su regreso. Ni siquiera David Bisbal fue capaz de distraerla cuando llegó a las cocinas. «Vengo con una actitud mucho más fuerte, vengo a por todas y vengo a ganar», opinó.Con la final de Masterchef Junior cada vez más cerca, Aina, Manuel y Martina son a día de hoy los concursantes que más puntos han acumulado a lo largo del programa, por lo que esta vez no tuvieron que enfrentarse al último reto. Jordi «se quitó el sombrero» ante la organización de Aina, Pepe no dejó ni las migas del postre elaborado por Martina y todos alabaron el sabor, la presentación y la técnica de las milhojas que preparó Manuel. Mauro fue en cambio el ganador de la prueba final con un plato de vacuno con sémola souflada y sésamo calcado al que hizo Arzak.Ana Oca, inquieta, deportista, nerviosa y activa, llegó a Masterchef Junior con las cosas claras: «No seas como el de enfrente, se diferente». La pequeña es fan de Extremoduro, toca la batería, hace vela y compite en atletismo. Pero, ¿cuándo germinó su pasión por los fogones? Ana se aficionó a la cocina unas navidades cuando vio a su abuela preparar la cena de Nochebuena. «Se enamoró de los sabores y olores que salían de las cazuelas -reza su ficha en la web del concurso culinario-. Desde entonces, abuela y nieta cocinan a menudo recetas tradicionales con las que Ana se ha ido convirtiendo en una auténtica apasionada de los fogones».Su padre, Daniel Oca, edil independiente en la corporación de Cee, relata como se ha vivido desde el concello coruñés el paso de la pequeña por el concurso: «En Cee, con 7.000 habitantes, está todo o mundo coa toleira da nena, e a través do Facebook me chegan mensaxes desde Ribadeo, Viveiro... (donde Ana tiene familia) Nós vémolo como unha oportunidade para ela de coñecer os medios de comunicación, ou como neste programa, a dez cociñeiros con estrelas Michelin. Ademáis fixo amigos e entre eles, hai moi bon rollo».