Hizo el mejor partido de la temporada con toque, desborde y finalización
14 abr 2014 . Actualizado a las 19:11 h.Acostumbrada a que su equipo sumara puntos gracias a su solidez defensiva y sacar rentabilidad de los escasos goles que marcaba, la afición blanquiazul comprobó ayer que este Dépor también tiene fútbol. Y, además, que si añade este ingrediente a la sobriedad, el resultado es un partido redondo como el de ayer con tres puntos más y sin sufrir.
Esquema
El 4-1-4-1 de emergencia sin pivote defensivo nato funcionó
La lesión de Alex Bergantiños y la sanción de Wilk hizo a Fernando Vázquez improvisar un 4-1-4-1 sin un pivote defensivo nato, en el que Juan Domínguez se situó por detrás de la línea de cuatro creadora. Y el Dépor no sufrió. La escasa intensidad mostrada por el Recre, sobre todo en el primer tiempo, también ayudó. Pero lo cierto es que para encuentros en casa en los que al equipo se le presume un control del juego, la fórmula de ayer puede no ser descabellada.
Seguridad
Solo un gol en los últimos cinco partidos
En los últimos encuentros, el Dépor ha tenido numerosos contratiempos en forma de bajas y ha modificado su forma de jugar: unas veces más vistoso, como ayer o frente al Tenerife, otras menos, como en Zaragoza, Madrid o contra el Barça B. Pero si algo no ha variado es la seguridad. En los últimos cinco partidos, solo un gol en contra.
Presión
La línea de creación presionó bien la salida del balón rival
Fernando Vázquez puso ayer juntos de salida cinco futbolistas técnicamente espectaculares: Juan Domínguez, Sissoko, Juan Carlos, Rabello y Luisinho. Sin embargo, aun siendo un medio del campo netamente creativo, también demostró que sabe sufrir y presionar la salida del balón del Recre. De hecho, así llegó el primer gol. Juan Carlos presionó al central, robó y se plantó solo ante el meta. La definición perfecta ya se le suponía. En este trabajo sucio y oscuro resultó encomiable Rabello, quien con el buzo de trabajo puesto provoca muchos robos de balón, no ya suyos, sino de sus compañeros que se aprovechan de su presión.
Los cambios
El técnico acertó con los nombres y el momento de hacerlos
Con un Borja Bastón impreciso y lento a la hora de llegar a los balones (solo puso cierta voluntad con tímida presión), y un Sissoko ya sin gota de gasolina, esta vez Fernando Vázquez evitó echar el equipo atrás y prefirió cambiar hombre por hombre. Así dio entrada a Ifrán y Núñez. El resultado no pudo ser mejor. Un minuto después, centro del extremo y gol del delantero. Con los dos el equipo ganó mordiente y consiguió sacudirse el dominio que estaba tratando de imponer el Recre. Ambos protagonizaron varias acciones entre ellas otro centro de Núñez, esta vez pasado, que Ifrán llegó a rematar pero muy forzado.
Inicio de jugadas
El equipo abusó en exceso del saque en largo sorteando el balón
Quizá uno de los peros del partido es que, con un equipo con ganas de combinar como el que ayer alineó Vázquez, sobran algunos saques en largo de Lux y desplazamientos de los defensas. Muchas de esas acciones, dirigidas a Borja Bastón, tuvieron un resultado idéntico: sorteo y pérdida del balón.