«Han sido dos semanas de mucho entrenamiento y muchos cambios», reconoce el centrocampista
18 oct 2014 . Actualizado a las 16:48 h.Álex Bergantiños, centrocampista del Deportivo, ha abogado por ofrecer ante el Valencia en el estadio de Riazor una imagen diferente a la que ha dejado el equipo en los cuatro últimos partidos, todos ellos saldados con derrota, y, especialmente, el último, ante el Sevilla, que le envió (4-1) a la última plaza de la clasificación. «Que hay que cambiar está claro. Cuando pierdes cuatro partidos seguidos y con los goles que encajamos, la gente quiere ver cosas diferentes», comentó el jugador blanquiazul en su comparecencia ante los medios de comunicación.
El Deportivo pretende «jugar más juntos», que es en lo que «más incidió» el entrenador Víctor Fernández, y tratará de «hacer daño» al Valencia «con la gente rápida» que tiene en ataque. «Han sido dos semanas de mucho entrenamiento y muchos cambios, de corregir cosas en las que no estábamos bien. Hemos trabajado muchas cosas nuevas, estar mejor colocados tras pérdida y tenemos que ponerlo en práctica. Estamos muy concentrados. La otra victoria llegó tras un parón y esperemos que se repita», indicó en referencia al 0-1 ante el Eibar en la tercera jornada de Liga.
Enfrente, estará un Valencia que sigue invicto en la Liga BBVA después de siete encuentros disputados y que es el tercer máximo goleador del campeonato. «Es difícil encontrar puntos débiles porque está con confianza. No obstante, sus resultados ocultan alguna carencia que pudimos ver en los vídeos. Esa racha de resultados que llevan tiene que parar en algún momento y esperemos que sea ante nosotros», declaró.
Álex Bergantiños aseguró que el Deportivo tiene «plantilla suficiente» para imponerse al Valencia en el estadio de Riazor, escenario donde los levantinos han puntuado en todas sus visitas ligueras desde hace once años. El Valencia es un rival histórico del conjunto coruñés, le arrebató una Liga en 1994 y le mandó a Segunda División en 2011 tras veinte temporadas consecutivas en Primera, aunque también fue víctima de los blanquiazules en la final de la Copa del Rey de 1995 y en la Supercopa de España del 2002. «Soy coruñés, se han vivido enfrentamientos especiales con el Valencia y para la afición es un partido un poco diferente por esa rivalidad. Siempre que sea sana, todo suma y, si hace que el ambiente sea más intenso, bienvenido sea», comentó el jugador blanquiazul