El centrocampista recibe el alta y busca hueco en la alineación del Deportivo
24 oct 2014 . Actualizado a las 15:33 h.Sin que su presencia entre los dieciocho elegidos para la convocatoria del Dépor esté confirmada, el alta médica de Juan Domínguez mete a Víctor Fernández en el bendito aprieto de tener que decidir desde el talento qué equipo desea para el partido de pasado mañana (17.00 horas, Canal+ Liga y GolT) en Barcelona contra el Espanyol. Si quiere verticalidad y descaro, quizá prefiera dar continuidad al que espantó fantasmas con una goleada frente al Valencia, pero si desea más solidez y control, el centrocampista canterano podría saltar directamente desde la enfermería al terreno de juego.
Cuando se lesionó, en los albores del derbi contra el Celta, el técnico se encontraba en plena búsqueda de la mejor posición de su jugador, al que había situado como mediocentro defensivo (contra el Granada y el Rayo) y en la mediapunta en Éibar, donde marcó para dar la victoria a su equipo, y contra el Madrid. Desde el fichaje de Medunjanin, el canterano parece apartado de la función de centrocampista creativo, con la que dio el salto a Primera y la que se adapta como anillo al dedo a sus virtudes de futbolista con la mirada en el horizonte y la pelota en el pie.
Es cierto que su previsible vuelta a la lista de convocados de Víctor Fernández provocaría un nuevo terremoto en una plantilla como esta de veinticinco futbolistas, pues en buena lógica relegaría a la grada a Juan Carlos, destacado el pasado domingo, o a José Rodríguez, autor del pase del tercer gol, o a Álex Bergantiños, quien el pasado domingo por primera vez se quedó sin actuar ni un solo minuto, pero cuyo carácter competitivo siempre está fuera de cualquier duda.
Banda
Las cábalas con Juan Domínguez se pueden trasladar a la banda de la mano de Canella, quien también ayer recibió el visto bueno de los médicos para jugar. El lateral dispara las posibilidades en la izquierda, donde Luisinho ofreció un mejor balance defensivo que en partidos precedentes y Fariña jugó con un partido completo. Su presencia entre los dieciocho de la convocatoria también obligaría a descartar a otro de los elegidos del pasado domingo, cuando Laure pasó de la titularidad a la suplencia.
Y en pleno debate sobre cómo hacer hueco a Domínguez y a Canella, también Postiga apura sus posibilidades para recuperarse a tiempo y jugar contra el Espanyol. El delantero, que ayer por primera vez en esta semana participó en la pachanga a campo completo con que terminó el entrenamiento y luego aun se quedó con el recuperador para insistir en los disparos a portería, confía en recibir entre hoy y mañana el alta médica, por lo que la decisión final dependería de Víctor Fernández.
La reaparición del internacional portugués en el trabajo junto a sus compañeros se produjo desde el bando de los presumibles suplentes, que se enfrentaba al once de los supuestos titulares, en el que formaban Fabricio, Laure, Insua, Sidnei, Luisinho, Cuenca, Wilk, Medunjanin, Canella, Lucas y Cavaleiro. Las novedades respecto al equipo que goleó al Valencia fueron Laure y Canella en los puestos que entonces ocuparon Juanfran y Fariña.
Sea cual sea su decisión, el caso es que el técnico por fin está en disposición de abrir el abanico de su plantilla y elegir la seña de identidad con que desea marcar a este nuevo Dépor.