Antes de jugar contra el Elche, Víctor motivó a sus hombres con una recopilación de sus mejores acciones
17 dic 2014 . Actualizado a las 15:33 h.Si Luisinho es capaz de recordar a Roberto Carlos subiendo la banda. Si Cavaleiro no para de correr durante los noventa minutos y desconcierta a la defensa rival. Si Toché consigue rematar con criterio y colocar bien el balón. Si José Rodríguez levanta Riazor metiendo pases entre líneas que Helder Postiga consigue aprovechar para provocar penaltis. Si Wilk y Alex Bergantiños hacen buena la presión y recuperan balones. Si la zaga está ordenada y despeja cuanto balón le llega. Y si Fabricio salva goles cantados... ¿Por qué el Deportivo no va a ser capaz de ganar al Elche?
Es el mensaje que trató de transmitir el cuerpo técnico del Deportivo a sus jugadores en la charla previa al partido contra el conjunto ilicitano. Lo hizo a través de un vídeo motivacional de unos quince minutos en el que recopilaban las mejores acciones de los blanquiazules durante los tres anteriores encuentros disputados en Riazor, en los que mereció algo más que un empate contra la Real Sociedad, otro ante el Málaga en la Copa y una derrota frente a los andaluces en la Liga.
Esta vez no hubo música motivacional. Solo imágenes de sus mejores acciones con el sonido original de retransmisión captado de un canal italiano. Los futbolistas contemplaron durante ese cuarto de hora las cosas que son capaces de hacer en los partidos y qué cerca han estado en muchas ocasiones del gol.
«Cuando las cosas no salen y los resultados no acompañan, siempre es bueno recordar lo que uno es capaz de hacer. Ayuda a coger confianza», explica uno de los futbolistas convencido de que la experiencia resultó positiva. El partido realizado frente al Elche, con victoria incluida, así lo demuestra.
Los jugadores saltaron al campo convencidos de sus posibilidades, conscientes de que si habían sido capaces de poner contra las cuerdas a equipos teóricamente superiores como la Real Sociedad o el Málaga, estaban capacitados para derrotar al colista.
Esta vez, Víctor cambió el tradicional vídeo de repaso de errores cometidos con las consiguientes críticas en los fallos (lo hubo en jornadas previas), por un reconocimiento público de las virtudes de todos y cada uno de los hombres que iban a afrontar el decisivo duelo contra el Elche. Lo que reforzó su moral.
«Todo lo que sea buscar soluciones para lograr victorias y salvar al equipo es bien visto por el vestuario», explica otro de los participantes en la sesión.
Tras el partido disputado el lunes, quedó claro que Luisinho y Cavaleiro hacen diabluras por las bandas, que José Rodríguez empieza a creer en sí mismo, que la defensa achica agua cuando hace falta, que Fabricio sigue metiendo manos imposibles... El objetivo que debieron plantearse los técnicos se consiguió casi en su totalidad. Porque al Dépor volvió a faltarle gol.