«A veces estar en el banquillo viene bien, digamos que he espabilado»

Xurxo Fernández Fernández
xurxo fernández A CORUÑA / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

GONZALO BARRAL

Lamenta su papel en el campo: «La banda derecha nunca ha sido mi sitio ni creo que lo vaya a ser»

29 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

José Rodríguez (Villajoyosa, diciembre de 1994) comenzó la temporada «llamando fuerte a las puertas de Primera», según Víctor Fernández. Pero fue perdiendo ímpetu y con el cambio de míster apenas gozó de minutos.

-¿Por dónde para?

-En Alicante ya, con la familia. Estuve en Madrid para ver a mi hermano (milita en la cantera blanca) y me vine aquí a pasar las vacaciones con los míos.

-¿Sigue con el subidón de la permanencia o ya piensa en la próxima temporada?

-Estoy muy contento por lo que pasó el sábado. Era lo que todos queríamos. Lo que necesitábamos después de un año tan duro.

-Duro para el Dépor, pero también para usted.

-Sí es cierto que he tenido una temporada muy difícil, que no me he sentido importante, sobre todo al final, pero de ahí a no celebrar una permanencia tan necesaria... A mí el club, sobre todo el presidente, y la gente de A Coruña me han tratado muy bien. Fenomenal, diría yo.

-En esa lista falta el entrenador.

-Con el míster creo que no he conseguido entenderme bien. No conté para él y nunca tuve claro el motivo. Ni siquiera supe por qué decidió contar conmigo el último día. Yo a todos los entrenadores les he pedido siempre lo mismo: que entiendan que soy un jugador en formación. Que solo tengo 20 años y muchísimas ganas de aprender. Y que me puedo equivocar, pero que necesito que me digan lo que quieren de mí. Me gusta que sean muy claros. Con el anterior también me sentí así al principio, pero luego por fin vino y me dijo las cosas claras. No pido más; luego unas veces me puso y otras no, pero yo sabía lo que tenía que hacer.

-¿Con eso quiere decir que no volvería al Dépor?

-¿Volver? No lo sé. Ya he dicho que estoy muy contento con muchas cosas de las que me han pasado esta temporada. He estado en el mejor vestuario en el que he entrado en toda mi carrera, por ejemplo. Y he sentido el cariño de la afición, en la calle y en el estadio. Pero la realidad es la que es y en los últimos dos meses no han contado conmigo. Supongo que si me llamasen para volver pediría hablar con el entrenador porque necesitaría saber que entro en sus planes y qué quiere de mí. De todas formas, soy jugador del Real Madrid y ese es el club con el que tengo que hablar primero.

-El Real Madrid lo cedió aquí para que creciera. ¿Lo ha hecho?

-Sí claro. Soy mejor futbolista que cuando llegué, de eso no hay duda. Entre otras cosas, porque nunca había jugado una temporada en Primera y ahora ya tengo esa experiencia. 25 partidos a los 20 años no son pocos. He convivido con gente que ha pasado por todo tipo de situaciones, gente como Lopo, Manuel Pablo o Toché. Y de ellos se aprende un montón. Y bueno, a veces estar en el banquillo también viene bien. Digamos que he espabilado.

-Además ha jugado en una posición nueva.

-Sí, pero creo que eso no me ha venido tan bien. La banda derecha no ha sido nunca mi sitio, ni creo que lo vaya a ser. Aunque ahí he hecho algunos partidos buenos, como contra el Athletic. Pero mi mejor partido de la temporada fue con la sub21, jugando en mi posición natural. La llamada de la selección fue una de las mayores alegrías del año.

-¿Se arrepiente de haber venido?

-No. El Dépor tiene una afición fantástica, que ha tenido que superar momentos terribles como el asesinato de Jimmy, y en A Coruña me han tratado estupendamente. He conocido gente que me ha sorprendido. Cuenca, por ejemplo. Nunca pensé que pudiera tener una relación así con alguien del Barça (ríe). Y buenos futbolistas, como Lucas. Creo que si él no hubiera estado tanto tiempo lesionado la historia habría sido distinta. Luego también había en el equipo varios jugadores con mucho nivel que no se han aprovechado. Pero al final nos salvamos, que era lo que todos necesitábamos.

«En el descanso pregunté cómo iba el Eibar y pensé: 'otro descenso, madre mía'»

Pese a que Víctor Sánchez casi no contó con el alicantino, sí le dio la oportunidad de disputar los últimos minutos del encuentro ante el Barça y poder festejar sobre el campo y vestido de corto la ansiada permanencia. Un logro que, según confiesa el futbolista, llegó a dar por imposible durante el duelo definitivo.

-Sea sincero ¿en el Camp Nou vio al Dépor en Segunda?

-En el descanso le pregunté a Barros (delegado blanquiazul) cómo iba el Eibar. Me dijo que 2-0 y sí, nos vi en Segunda. Pensé «otro descenso, madre mía».

-Con el gol de Lucas se le pasaría el pesimismo.

-Yo hasta que marcó Salomao no nos vi salvados. Es cierto que cuando entró Haris cambió todo, que empezamos a jugar mejor, pero enfrente estaba el Barça. Luego fue una liberación enorme después de un año tan difícil.

-¿Le sorprendió ver al presidente en el vestuario en el descanso del encuentro?

-Mira, yo creo que la gente se ha equivocado mucho con este presidente. Y sí, puede que haya cometido errores, sobre todo con la afición, que lo ha pasado muy mal y nos ha ayudado muchísimo, pero él es un tío normal que se le nota que quiere un montón al equipo. Creo que es difícil que se den cuenta de lo complicado que lo ha tenido y que pese a ello siempre ha cumplido su palabra. Cuando nos juntó para comer nos dijo lo que quería de nosotros y cuál era su plan. Y la verdad es que cumplió.

-¿En el Dépor no le han dicho nada sobre si quieren que vuelva?

-No. Todavía no he hablado con mi representante, pero sí me ha mandado mensajes acerca del interés de varios clubes de Primera y del extranjero. A ver qué me dice ahora el Real Madrid.