Bodipo marcó el único gol del último Alavés-Dépor, jugado hace diez años, en el que se despidió del equipo vasco antes de iniciar su etapa en A Coruña
19 sep 2016 . Actualizado a las 17:28 h.El Dépor vuelve a Mendizorroza diez años después con una cuenta pendiente. Allí zanjó ocho temporadas consecutivas de idilio con las competiciones europeas. En la recta final de aquel partido, marcó Bodipo, que disputaba su segunda campaña en el Alavés y unos meses después se enfundaba la camiseta del Dépor. «Fue un día trágico para la afición del Alavés, porque se consumó el descenso. Marqué en el minuto 78, nos quedábamos en Primera y se cumplía el tiempo en Montjuich. Allí se jugaba el Espanyol-Real Sociedad, pero Corominas en el 93 marcó y pasamos de la euforia al silencio sepulcral. Con la derrota, el Dépor también se quedaba fuera de la Intertoto. Era un equipo que llevaba muchos años jugando en Europa, pero se quedaba sin esa posibilidad», recuerda Bodipo, que en el Alavés-Dépor de esta noche (20.45 horas, beIN LaLiga) sabe perfectamente a quiénes animará.
«En el Alavés me trataron muy bien y fueron dos años de mi carrera, pero yo tengo el corazón deportivista y recreativista», dice en relación también al Recreativo de Huelva, que le abrió la puerta a la élite. «Le deseo lo mejor al Alavés, de vuelta en Primera, porque tiene que estar ahí, pero soy deportivista de corazón», añade mientras se deshace en elogios por la afición. «En mi carrera me ha pasado que algunos clubes que estaba a gusto en el campo, luego no tanto en la ciudad. En cambio, en A Coruña fue al revés, estaba feliz en la ciudad, pero no tanto con los resultados del campo», indica en relación a sus siete años (2006-2013) en Riazor. «Es verdad que en el Dépor podía haber dado mucho más, en el sentido de más goles, pero hice todo lo que estaba en mi mano profesionalmente. Nadie me puede achacar nada, era el primero en llegar y el último en irme. Trabajaba hasta en días libres. Tengo que tener la conciencia tranquila», afirma después de acordarse de la grave lesión de ligamento cruzado que padeció al inicio de su estancia: «Me truncó, porque yo era un jugador muy potente y me costó coger esa potencia y chispa de nuevo».
Bodipo entrena actualmente en la Escuela Internacional del Barcelona y es comentarista de Canal Sur. «Viajo por todo el mundo entrenando en aquellos lugares donde el Barça tiene escuelas. También estuve de prácticas en las categorías inferiores del Sevilla y con Oltra en el Recre. Poco a poco me voy formando. Estuve prácticamente por toda Italia, en Venecia, Pescara, Perugia,.. En Croacia, en Buenos Aires, también en la escuela que hay en la Manga del Mar Menor... he hecho muchos kilómetros este verano», explica, aunque reconoce que aún tiene pendiente el regreso a A Coruña: «Hay que ser persona antes que futbolista. La afición me ha visto cómo he sido y, por eso, a día de hoy aún tengo mi peña, que en octubre abre una nueva sede. Puede ser que me acerque, aunque me da mucha nostalgia».