Gael Kakuta: «Si me ofrecieran más tiempo aquí diría que sí, necesito establecerme»

TORRE DE MARATHÓN

GONZALO BARRAL

«Me cuidan, me gusta la ciudad y el club», resume el extremo, que aspira a jugar con el Congo

11 feb 2017 . Actualizado a las 17:03 h.

Hace solo tres años se movía en bici por Vallecas. «Aquí no puedo, que esto queda muy lejos», lamentaba el jueves en la grada de la ciudad deportiva de Abegondo. Hablaba en inglés, porque el castellano aún no ha calado en Gael Kakuta (Lille, Francia, 1991) pese a haber pasado ya más de año y medio en España. Casi 20 meses repartidos entre tres equipos, porque el extremo blanquiazul vive desde hace tiempo en un tránsito permanente que pretende detener en A Coruña. Se dice feliz en el Dépor, aunque le cueste reflejarlo en una sonrisa natural para la foto.

-¿Todo bien?

-¡Sí! Las cosas están yendo muy bien. Tuve una buena bienvenida y ha sido muy fácil acomodarme. A Coruña me parece un lugar muy agradable para vivir, aunque el tiempo no ha estado muy bien últimamente.

-¿Encontrar buenos restaurantes sigue siendo su primera misión cuando cambia de equipo?

-Por supuesto. Ya encontré algunos lugares que me gustan. Y ahora Fayçal ya está por aquí y me ha recomendado alguno más. Con él es más fácil entenderme porque habla francés, y además es buen tipo. Hemos estado charlando un rato y me parece muy bueno tenerlo con nosotros.

-Con Ola John también parece haber conectado rápido.

-Sí. Además le ha tocado la taquilla de al lado en el vestuario, así que me va a ayudar con mi inglés; es bueno para mí poder seguir practicándolo. Ola también es muy buena gente y como pasé un tiempo en Holanda, así practicaré también mi holandés.

-Lo de Holanda fue hace cinco años. Antes, Francia e Inglaterra y después, Italia, España y China. ¿No tiene ganas de asentarse en un lugar? ¿Quizá aquí?

-Es cierto que necesito establecerme. Si me ofrecieran quedarme más tiempo diría que sí. Estoy muy contento aquí, me cuidan y me gusta la ciudad y el club; su historia. Así que por qué no.

-Apenas lleva aquí unas semanas ¿De verdad se quedaría?

-Claro que me gustaría. Pero también sé que es un reto para mí. Tengo que hacerlo al menos tan bien como lo hice en el Rayo.

-¿Por qué eligió al Dépor?

-Porque se me ofreció la oportunidad de volver a la liga que más me gusta, la que considero que más se ajusta a mis habilidades. Y porque dentro de esa oportunidad, el equipo era el Deportivo, que juega muy bien al fútbol. No se trataba solo de volver para jugar en cualquier equipo europeo. Este era el lugar.

-Llega cedido del Hebei. ¿Por qué se fue a China?

-¿Y por qué no?

-Es un salto extraño.

-Estaba en Sevilla y aquello no funcionaba para mí. Había trabajado muy duro para jugar en el Chelsea y tampoco había funcionado. Luego vinieron las cesiones y finalmente la oportunidad de pertenecer a otro equipo, pero llegué a Sevilla en situación de guerra. Así que entendí que aquello no iba a funcionar y China fue la oportunidad de salir.

-¿Qué pasó en el Sevilla?

-No me gusta hablar de esa etapa. Simplemente tomé la decisión de irme a China y no me arrepiento. He aprendido mucho allí, sobre fútbol, sobre la cultura de ese país... De muchas cosas. En los últimos meses además tuve la suerte de coincidir con Pellegrini, que para mí es uno de los mejores. Aprendí muchísimo.

-Cuando Óscar, que estuvo en el Chelsea, como usted, eligió irse a China hace unos meses, Jurgen Klopp dijo que le parecía una decisión absurda para alguien de 25 años. Usted tenía 24.

-Nunca sabes dónde te va a llevar esta profesión. Es imposible saber dónde vas a acabar. Luego todo el mundo da su opinión, dice que te fuiste a tal sitio cuando eras demasiado joven, por ejemplo. Pero mire Óscar, jugaba mucho hasta que otro entrenador llegó con un estilo y unas tácticas diferentes. Entonces Óscar, que es un muy buen futbolista, ve que no encaja, que no tiene minutos, y toma la decisión de salir. Es lógico. Él tiene calidad y quiere un equipo en el que demostrarla. En Europa o en China. ¿Qué más da?

-No me dirá que el nivel es el mismo.

-No. Por supuesto que hay diferencias. Todas las competiciones son diferentes. Pero es la vida de Óscar; al final del día es él el que la ha vivido. Y luego, que los demás hablen, porque eso no va a cambiar su vida.

-Cleo, otro brasileño, fue de los primeros en elegir China. En lugar del Liverpool. Dijo que en Europa habría tenido que pasar muchos años jugando y luego entrenando para hacer el mismo dinero que hizo en China. Supongo que ese es también un buen motivo, ¿no?

-Mire, la mayoría de los jugadores amamos el fútbol desde niños. Es lo que siempre hemos hecho, lo que se nos da bien, pero al final esto es también un negocio. Cuando eres un crío solo disfrutas jugando, pero luego esto se convierte en tu trabajo. ¿No querría ganar más en su trabajo?

-Sin duda. ¿Pero no echaba de menos otro nivel competitivo?

-Claro que el nivel de muchos jugadores no es el mismo que puedes encontrar en Europa, pero eso no significa que no se pueda crecer, que no se pueda aprender de esos jugadores y de quien te entrena. Las cosas no son más fáciles allí, precisamente porque la cultura de fútbol es muy distinta, y por eso hay estrellas en Europa que no triunfan en China.

«He madurado, antes pensaba que con mi calidad sería suficiente»

Aunque nació en Francia, tiene ascendencia congoleña. Se dice orgulloso de la selección que superó la fase de grupos en la última Copa África, y desvela que trata de arreglar papeles para poder ser internacional por el Congo, a donde viaja cuando puede.

-¿Qué opina del juego del Dépor?

-Salimos a jugar al fútbol. A jugar, a mover la pelota y a intentar recuperar el balón arriba. Eso es bueno para mi forma de entender el juego. Disfruto en este equipo.

-Puntos solo llevan 19.

-Son cosas que pasan. Es imposible que todos los equipos tengan una temporada perfecta, ¿no? Lo importante es que estamos trabajando muy duro para lograr más puntos cuanto antes.

-En su Rayo vivió los años felices, ¿se parece algo a este Dépor?

-Yo quiero jugar al fútbol, un buen fútbol. Aquel equipo lo hacía y este también.

-¿Y encuentra algo que conecte a Paco Jémez y a Gaizka Garitano?

-Paco me ayudó mucho, dentro y fuera del campo. Fue la mejor experiencia de mi carrera porque coincidí en el mejor momento con un entrenador que sacaba lo mejor de sus jugadores. Y mi entrenador aquí también lo hace, a su manera. Le gusta ser muy claro con el jugador, exigirle. Quiere que todo vaya perfecto durante la semana para afrontar los partidos con la mejor preparación posible. Nos exige una mentalidad ganadora, darlo todo.

-Solo tiene 25 años y ha llevado ya la vida de un veterano.

-He madurado mucho con la carrera que he tenido. Soy mucho más profesional. Antes pensaba que con mi calidad sería suficiente, pero con el tiempo entiendes que solo con eso no alcanza, que tienes que ser inteligente, que te tienes que cuidar, que es un duro trabajo diario. He aprendido de distintos tipos de entrenadores y jugadores; he podido crecer.

-De entre sus excompañeros de vestuario, ¿con quién se queda?

-Tendría que elegir a tres. Anelka, Moussa Dembele (jugador belga del Tottenham) y Deco, que tenía una visión de juego increíble, un primer toque perfecto. Tengo un gran respeto por los tres porque les gustaba compartir su experiencia, enseñar.