El lateral derecho del Deportivo se pasó por la sala de prensa de Abegondo tras el entrenamiento
19 feb 2018 . Actualizado a las 18:07 h.Eneko Bóveda, lateral derecho del RC Deportivo, ha analizado la situación en que se encuentra el equipo gallego y ha concluido que «más» le «vale sacar puntos cuanto antes» porque cada jornada que pasa y cada traspié merman sus opciones de permanencia, si bien ha matizado que ni vagan por el césped ni son un «alma en pena».
El defensa reconoció en rueda de prensa que «puede que la gente» les «dé por muertos y es posible que acierten a mitad de temporada», pero advirtió de que «el equipo ni vaga (por el campo), ni es un alma en pena ni está muerto ni está a punto de morir». «No salen los resultados y se puede hacer un análisis de los últimos minutos o un análisis más objetivo, de todo el partido, donde hay luces y sombras. Se trata de trabajar y darle la vuelta a esa segunda situación», razonó.
Preguntado sobre si el partido del viernes ante el Espanyol es una final, apuntó que «cada vez hay menos tiempo» y «lo de menos» es cómo se le «llame» al partido, la etiqueta que se le ponga. «Todos somos conscientes de que cada oportunidad que perdemos implica que está cada vez más difícil el objetivo y más nos vale sacar puntos cuanto antes», precisó.
Respecto a cómo ve a su entrenador, Clarence Seedorf, que se ha estrenado con dos derrotas como preparador blanquiazul, aseguró que el holandés «mantiene intactas sus fuerzas». «Es un reto muy difícil, pero lo afronta con energía y ganas y yo me siento identificado con eso y a tope con él», señaló el jugador vasco, que llegó en el mercado invernal.
Bóveda se refirió a la derrota del sábado ante el Alavés (1-0) en un partido en el que el Deportivo no disparó entre los tres palos (hubo un lanzamiento a la madera) y tras el gol local no dio síntomas de reacción. «Una cosa es la mala reacción o falta de reacción del equipo al encajar un gol, pero el ánimo y las ganas de luchar nunca deben bajar. Después, en fútbol no se trata de meter a jugadores de la NBA en el campo y colgar balones, se trata de jugar con personalidad y echarle el valor en momentos difíciles en que se te encoge el pie o tienes dudas», matizó. «Lo que hay que hacer es trabajar más para reponerse a ese hundimiento en el que estamos y mantener la cabeza arriba y no estamos orgullosos de esa reacción tras el gol del Alavés», añadió.
Tras la derrota ante el Alavés los aficionados que se desplazaron a Mendizorrotza silbaron al equipo y en el entrenamiento de este lunes, una mínima representación del deportivismo increparon a los futbolistas.
«No es la primera vez que vemos este tipo de cosas. Cada año en Primera hay tres, cuatro, cinco o seis equipos que no cumplen los objetivos y suele ser bastante habitual que las decepciones se trasladen a ese sector que lo vive con más pasión. No creo que le debamos prestar demasiada atención. La solución pasa por los de dentro», dijo antes de pedir el apoyo de la afición.
«La mejor manera es intentando arropar, tener esas palabras medianamente agradables y empujar, porque todavía queda tiempo. Lo que pase a final de temporada, si es malo, nos va a afectar a todos; y si es bueno, también. Que la gente sienta que está en nuestro mismo barco», sostuvo.
«Entiendo que unos vivan las cosas con mucha pasión y se tengan reacciones que pueden llegar a ser desmedidas. No soy nadie para decirle a nadie cómo tiene que vivir una pasión por un escudo, pero conozco al vestuario y sé lo que la gente está sufriendo y que si sacamos al Deportivo adelante vamos a festejarlo todos y a sentir alivio y alegrías», añadió.
Insistió en que «cada uno desde su casa puede poner su granito de arena» y dijo que los jugadores deben poner «cien mil granitos» porque son los que salen al campo.
A nivel individual y a pesar de cómo está el equipo, de que «las semanas se hacen duras sobre todo por los resultados y porque lo que rodea al equipo empuja hacia abajo», Eneko Bóveda confesó que tiene «una ilusión» que llevaba «tiempo sin sentir» en el proyecto que ha emprendido en el Deportivo.