El portero gallego de 34 años firmará un contrato de dos temporadas con opción a una tercera
22 may 2018 . Actualizado a las 18:11 h.Antes incluso de cerrar el entrenador, Carmelo del Pozo ya tiene su primera apuesta para el proyecto del Deportivo en Segunda División. El portero vigués Dani Giménez ha alcanzado un acuerdo con el club coruñés para defender la meta blanquiazul durante las dos próximas temporadas y una más en el caso de cumplir una serie de partidos que no ha trascendido. De esta manera, a punto de cumplir los 35 años regresa a Galicia catorce temporadas después de haber abandonado la cantera del Celta para firmar por el Zamora.
Dani Giménez llega al Deportivo tras cuatro temporadas consecutivas en el Betis a la sombra de Adán. En este tiempo, solo ha podido disputar diez encuentros de Liga, cuatro de ellos en esta última temporada gracias a la lesión y posterior operación del meta titular verdiblanco.
Al Villamarín lo catapultó una sensacional temporada en el Alcorcón, con Miguel Álvarez, primero, y Bordalás, después, como entrenadores. En el equipo del sur de Madrid disputó todos los partidos de la temporada (42), encajando solo 40 goles. Menos que él solo recibieron esa temporada el Eibar (28) y el Deportivo (36). Los dos fueron los que ascendieron de forma directa a final de temporada, mientras que el Alcorcón acabó noveno en la tabla clasificatoria. Esta temporada tuvo como portero suplente a Manu, que procedía del Deportivo.
Coincidió con Rubén
No es el único portero blanquiazul con el que coincidió Dani Giménez a lo largo de su trayectoria deportiva. Un año antes, en el Rayo, en el que militó cuatro temporadas, estuvo a la sombra de Rubén Martínez, con el que labró una buena amistad.
Tras haber militado también en el Celta y el Zamora, el meta gallego llega ahora al Deportivo avalado por Carmelo del Pozo, con quien coincidió en el Betis. Sus números dicen que ha jugado 265 partidos en su carrera profesional, solo 21 de ellos en Primera y 68 en Segunda, totalizando entre ambas categorías 7.792 minutos. Entre los retos del nuevo meta blanquiazul se encuentra dar estabilidad (no se sabe si como primer portero o segundo) a una demarcación que esta temporada ha sido clave en el descenso blanquiazul a Segunda.