El Deportivo apuesta por el modesto técnico vitoriano para dirigir al equipo la próxima temporada, para lo cual, primero, debe rescindir el contrato de un año que le queda con el Zaragoza
01 jun 2018 . Actualizado a las 18:27 h.El Deportivo ya tiene entrenador para la próxima temporada. O, más bien, lo tendrá a partir del momento en el que el Zaragoza concluya su concurso en la Segunda División, en la que está ya clasificado para disputar el play-off de ascenso a Primera. Su técnico, Natxo González, será el máximo responsable del banquillo blanquiazul en el camino del próximo paso por el infierno. El objetivo es innegociable: devolver a la centenaria entidad a la máxima categoría del fútbol nacional.
Vitoriano de 51 años, Natxo González debe desvincularse primero del Zaragoza antes de acometer su desembarco en A Coruña, algo que sucederá a la conclusión del campeonato. Porque el acuerdo entre el entrenador y la entidad deportivista es total desde hace ya más de una semana. Según algunas fuentes, el pacto sería por la presente temporada con una opción de prórroga de una más en el caso de ascenso de categoría.
Cuando el torneo concluya, el entrenador vasco deberá llegar a un acuerdo con el Zaragoza para compensar el año y otro opcional que le quedan de contrato. En principio, su cláusula de liberación estaría entre cuatrocientos y quinientos mil euros, cantidad que, al menos de forma oficial, no asumirá el Deportivo, tal y como sucedió en su día, cuando se hizo con Carmelo del Pozo, quien tenía contrato en vigor en el Levante.
Apuesta de Carmelo del Pozo
Natxo González es una apuesta personal del director deportivo blanquiazul. Aunque mantuvo conversaciones con diferentes entrenadores, dos figuraban entre sus preferencias: Juan Ramón López Muñiz y el vitoriano. Con el técnico que logró el ascenso a Primera con el Levante no llegó a haber cercanía pues las posturas de ambas partes eran muy distantes, tanto en cuestiones económicas como de duración del contrato. Con Natxo González resultó todo más fácil, puesto que desde la primera toma de contacto su predisposición resultó total, incluso sabiendo que podía lograr el ascenso con el Zaragoza.
Aunque su experiencia en Segunda no es tan amplia como la de Muñiz, sí posee una amplia trayectoria como profesional, principalmente labrada en la Segunda B, en la que consiguió ascensos tanto con el Reus como con el Alavés, además de numerosas clasificaciones para los play-off, cayendo luego en las eliminatorias.
La mayoría de sus jugadores y entrenadores rivales coinciden a la hora de destacar el trabajo táctico que González hace en sus equipos: «Es un gran estudioso del fútbol. Le gusta tener perfectamente controlado al rival y a su equipo lo trabaja muy bien. En Vitoria hacíamos mucho entrenamiento táctico. Maneja mucha información del contrario», explica Luciano, exfutbolista profesional gallego que trabajó a sus órdenes en el Alavés dos temporadas, una en Segunda B y otra en la categoría superior.
En opinión del ex-defensa pontevedrés, «le gusta defender bien, con el equipo muy ordenado, pero cuando consigue la pelota, apuesta por mantener la posesión y mover el balón de un lado a otro. Al menos, cuando yo jugaba con él», reflexiona.
Trabajo, estrategia y posesión, tres señas de identidad que le atribuyen a un Natxo González que esta temporada ha conseguido meter al Zaragoza cuarto después de un inicio bastante irregular que a punto estuvo de costarle la cabeza en enero. Sin embargo, una racha de 11 victorias en 14 partidos le permitieron continuar y, probablemente, ser el próximo entrenador del Deportivo. Antes, un play-off de ascenso para seguir cogiendo experiencia.