Conozco a Vítor porque fuimos compañeros en el Paços de Ferreira, donde era un jugador clave para nosotros. Muy buen futbolista de mediocampo, es más un 8, un interior, que un 5, el clásico mediocentro, o un mediapunta. Era capaz de filtrar buenos balones al área y técnicamente estaba por encima de la media. En el Reus lo vi bien en las últimas temporadas, llegó en Segunda B y se adaptó bien a la categoría hasta subir y demostrar que también es un capaz de marcar diferencias en Segunda, con bastante calidad. Es cierto que ha sufrido problemas físicos y que ha estado tiempo parado, pero si está bien, le puede dar mucho fútbol al Dépor. Puede llegar a la portería contraria y tiene remate, pero su especialidad es más el último pase. Le gusta manejar el ritmo del partido y tiene personalidad. Si físicamente está bien, ofrece un gran rendimiento con el balón.
Respecto a lo que Natxo González tenía en la plantilla, me parece un jugador distinto. No tiene otro igual. Se parece a Carles Gil, porque también es de manejar la pelota y de filtrar pases que dejan al delantero solo, y es cierto que en esos aspectos son semejantes, pero Vítor me parece más constante, insisto, si está físicamente bien.
La dificultad que habrá de superar será el estado físico, porque es cierto que en los últimos tiempos en el Reus no ha podido jugar por culpa del fair play financiero. Habrá que ver cómo responde después de esa inactividad, pero domina la categoría, comprende que es de fuerza y contacto, así que sería lógico que al principio le pueda costar adaptarse a un ritmo alto como el del Dépor, pero el entrenador lo conoce y está preparado para superarlo.
Para mí, en mi equipo, siempre sería una opción. No solo por su talento y capacidad, sino porque se trata de un buen chico, un jugador muy tranquilo y con mucho respeto por todos. Estoy seguro de que si finalmente tiene la oportunidad, va a estar muy a gusto en A Coruña, una ciudad maravillosa y con una afición que sabe apreciar este tipo de jugadores.