Era un saque de banda de apariencia normal

Xurxo Fernández Fernández
Xurxo Fernández A CORUÑA

TORRE DE MARATHÓN

ANGEL MANSO

El gol del Deportivo en el Teresa Herrera, resultado directo del trabajo en Abegondo

12 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Bóveda que se aproxima al área. Bóveda que encuentra el hueco entre Pedraza y Feddal. Bóveda que alcanza el punto de penalti gracias a un control orientado, aprovechando la conexión con Koné. Bóveda que ajusta el disparo, otra vez recurriendo a su zurda, para salvar la salida de Joel.

Así concluye un gol que arranca con Bóveda dirigiéndose a sacar de banda, para no sacar. O mucho antes. Cualquier día entre semana en Abegondo. «Es algo preparado, trabajado», revelaría Bóveda después. Al lateral le cuesta menos que al míster leer en voz alta los partidos y las intenciones del equipo. Compartir su interpretación del nuevo Dépor hasta llegar al detalle; como el del 1-0 al Betis. «El gol viene de inicio de esa jugada», sostiene el carrilero vasco, aludiendo al momento en el que atraviesa la línea de cal y agarra con la mano el balón que Sidnei ha expulsado por un lateral.

Pero no es Bóveda el que saca. Se limita a entregarle la pelota a Galán. «Entre otras cosas se busca generar espacios a jugadores más hábiles. En saque de banda, una jugada típica es que te devuelvan el balón. En este caso, que se lo devuelvan a Galán seguramente sea mejor que que me la devuelvan a mí. Es su sitio natural. Él se relaciona más con ese tipo de acción. Ha establecido una buena relación con Ager en esas jugadas», detalla Bóveda, desgranando en sala de prensa lo que se puede apreciar revisando los 13 segundos que llevan al gol.

Porque efectivamente, Galán le envía el cuero a Aketxe, quien, atosigado por Pedraza, lo devuelve para después completar una pared. Salvada la presión en espacio reducido, el siguiente en intervenir es Bergantiños, ya en el carril central. Desde allí, sin marcadores próximos ?atraídos por la ejecución del saque de banda?, al capitán le es mucho más sencillo levantar la cabeza y encontrar a Koné en la frontal. A espaldas del punta se mueve ya Valle y también el próximo receptor del balón. Ese Bóveda que se aproxima al área, y encuentra el hueco, y controla para alcanzar el punto de penalti y batir a Joel. El que después, en sala de prensa cuenta que «son jugadas que cuando salen te llevas una alegría y la gente que lo prepara se siente reforzada». Así de fácil. Sin nada que esconder.