El técnico pone el acento en el aspecto defensivo: «Querría un equipo invulnerable»
04 ene 2020 . Actualizado a las 12:58 h.Al Deportivo le hacen falta voces de mando. Lo ha detectado enseguida Fernando Vázquez, quien en su comparecencia previa a la cita con el Numancia recalcó que «para construir un gran equipo necesitamos líderes». «Estamos en busca de líderes», añadió de inmediato el técnico de Castrofeito. Urge encontrarlos para afrontar una segunda vuelta que el nuevo entrenador blanquiazul prefiere considerar como parte de una competición distinta a la que con tan poco éxito ha encarado hasta ahora el equipo. »Vamos a empezar una liga nueva, de cero, y a ver si conseguimos sumar 36 puntos», apuntó Fernando, antes de plantear el choque de Los Pajaritos como un estreno: «Este es nuestro primera partido de Liga. La primera vuelta no existe».
Reclama el míster desprenderse del poso negativo del anterior tramo del torneo. «Ya les expliqué a los jugadores lo que tenemos que hacer en cuestión de puntos. Si no tuviésemos información previa, es posible. Quizá estemos contaminados por lo anterior, desilusionados, pero vamos a mirarlo como si el partido de Soria fuera distinto», reclamó.
De cara al duelo, solo hay una cosa segura: habrá doble pivote. «A nivel centrocampistas estamos muy cortos. Solo están Álex y Peru. No hay ningún otro jugador capacitado para ocupar esa posición», sostuvo el técnico. Las opciones se abren en el resto de zonas del campo. Por ejemplo en la zaga. «Si entreno una línea de cinco es porque pienso que es posible que la utilice», señaló Fernando, quien también se refirió al frente de ataque, donde Mollejo tiene muchas opciones de ser el referente de los coruñeses. «Se considera punta. Lo he visto jugar ahí. Él y Koné son delanteros, es mi percepción», subrayó.
En cuanto a las prioridades a la hora de construir la identidad del conjunto coruñés, el entrenador incidió especialmente en la solidez: «Querría un equipo invulnerable. En el año del ascenso, en la primera vuelta, conseguimos un equipo muy difícil de batir. Una roca. Y tenía jugadores de calidad». «Quiero que en el aspecto defensivo el Deportivo sea un boxeador al que no le puedan ni tocar la nariz. Que no nos hagan daño, que el equipo rival se impaciente», manifestó antes de subirse al autobús junto al plantel.