Las opciones del Dépor por meterse entre los tres primeros pasan por una carambola a 5 bandas. La visita del Pontevedra es clave por eludir la séptima plaza, que abre el riesgo al doble descenso
22 feb 2021 . Actualizado a las 15:50 h.Al Deportivo solo le quedan tres partidos para conocer por qué objetivo va a pelear finalmente. En Riazor, contra el Pontevedra (7 de marzo) y el Zamora (21 de marzo) y en Vigo frente al Celta B (14 de marzo). Nueve puntos para situar al equipo de Rubén de la Barrera en el camino de una de las cuatro categorías nacionales de las cinco que habrá la próxima temporada en España.
Las opciones de luchar por el regreso al fútbol profesional son cada vez más remotas, tras los resultados de la decimoquinta jornada. El Dépor está a seis puntos del líder Unionistas, a cinco del Zamora y a cuatro del Celta B, teniendo estos dos últimos un partido menos, los aplazados contra el Guijuelo y el Racing, respectivamente, que se juegan ya este miércoles. Además, los coruñeses están a tres puntos del Compostela, con el que además tienen el golaveraje perdido.
Para que el Dépor acabe entre los tres primeros, tendría que haber una carambola a cinco bandas. Ganar sus tres partidos y que pasaran tres de estas cinco circunstancias: que el Unionistas no sume más de tres puntos (tiene que visitar al Guijuelo y al Salamanca y recibir al Racing en la jornada final); mismo límite para el Zamora en sus próximos tres encuentros (Guijuelo y Compostela en el Ruta de la Plata y ante el Salamanca en el Helmántico); que el Celta B pinche en dos partidos además del que le enfrentará al Dépor (en A Malata ante el Racing, en San Lázaro contra el Compos o en O Vao frente al Coruxo); que el Compostela no sume más de cinco puntos (Celta B y Salamanca en casa y Zamora fuera); o que el Racing pinche en dos de sus cuatro partidos (Celta B y Guijuelo en casa y Coruxo y Unionistas fuera).
Si se dieran tres de esas cinco premisas, además de ganar los nueve puntos en juego, el Deportivo entraría entre los tres primeros clasificados, lo que le permitiría asegurarse una plaza en la próxima tercera categoría del fútbol español (la Primera RFEF). El problema es que solo entraría con 29 puntos (el Burgos ya tiene 30 a estas alturas en el otro subgrupo) y se vería obligado a ganar también casi todo en la segunda fase (son seis partidos) para colarse entre los tres primeros de ese nuevo tramo y jugar el play off.
Pero si meterse en el grupo de ascenso parece complicado, el Dépor tampoco tiene asegurado el intermedio, que solo pondrá en juego dos plazas para la Primera RFEF. Por eso necesita sumar todos los puntos posibles en estos tres partidos para llegar con opciones a la unión con el otro subgrupo, en donde el Langreo es ahora mismo cuarto con 21.
Pero, sin duda, el partido más importante para el conjunto blanquiazul será el próximo contra el Pontevedra, al que solo aventaja en dos puntos y que actualmente ocupa la séptima posición, la primera que condena al grupo de la permanencia. Los de Luisito cayeron contra el Compostela y saben que un nuevo tropiezo en Riazor les condena al pozo, mientras que un triunfo les saca de él. Tras el duelo de A Coruña, ya solo les restaría por jugar contra dos de los últimos clasificados (el Coruxo en Pasarón y el Guijuelo en el Municipal). De ahí la importancia para los coruñeses de ganar y hundir a un rival directísimo.
La victoria del Dépor ante el Pontevedra sería fundamental para alejar a los granates a cinco puntos con seis por jugar, pero no será definitivo para esquivar la séptima plaza. La victoria del Coruxo en Guijuelo coloca a los de Míchel Alonso a solo tres puntos de los coruñeses, teniendo los vigueses el golaveraje ganado. En el grupo de la permanencia solo los dos primeros tienen asegurada la salvación, y en el otro subgrupo ya hay equipos como el Oviedo B y el Lealtad con 18 puntos y un partido menos jugado.