El técnico del Numancia quiere un equipo con personalidad y atrevimiento en un encuentro que considera clave para la permanencia en la Primera RFEF
17 abr 2021 . Actualizado a las 05:00 h.El pasado mes de enero le fue encomendada la tarea de enmendar la trayectoria del Numancia. Álex Huerta (Soria, 1981) no lo dudó. Tras una vida dedicada a las categorías inferiores del club, llegando a ser segundo de Manix Mandiola antes de su destitución, el objetivo del técnico que hoy visita Riazor es mantener al equipo en la categoría de bronce. Gran parte de las opciones de conseguirlo pasa por el partido de esta tarde.
-Numancia y Deportivo han tenido vidas paralelas desde la temporada pasada. De jugar en Segunda a pelear por mantenerse en Segunda B.
-El año está siendo complicado. Desde el descenso de categoría, nuestra situación ha sido muy similar a la del Deportivo. Personalmente empatizo bastante con lo que están viviendo. Creo que nosotros hemos hecho un trabajo importante para no mirar atrás, para limpiar la cabeza y pensar solo en esta fase que tenemos por delante. El equipo lo ha entendido bien, llegamos en el mejor momento a todos los niveles de la temporada, con tres victorias consecutivas… y más allá de los resultados, con las sensaciones que transmite el equipo. Afrontamos el partido con mucha ambición.
-No entrar en el «play-off» de ascenso a Segunda imagino que no estaba entre sus planes.
-El objetivo de un equipo como el Numancia, después de 23 años en el fútbol profesional, era volver a ascender. Por lo tanto, desde luego que no estamos donde queríamos estar, y no era algo que estuviese previsto. Pero viendo el formato de la competición, tan cortoplacista, habiendo tenido que hacer un equipo nuevo, con muchas circunstancias en contra, por un brote de covid en un momento trascendental de la temporada, un cambio de entrenador… ha hecho que haya sido difícil. Pero el objetivo, una vez que no se ha conseguido la vuelta al fútbol profesional, es estar lo más arriba posible que ahora mismo es la Primera RFEF.
-Usted sabe bien lo que es empezar desde abajo. Es un técnico de la casa. ¿Cree que en momentos difíciles es importante tirar de la gente que siente los colores?
-Eso a quien le compete es a quien toma las decisiones. Solo puedo estar agradecido a la dirección deportiva y la Junta Directiva. Desde hace 13 temporadas estoy a disposición de lo que decidan, que ahora mismo es sacar a flote este proyecto. Estoy en lo personal fuerte, bien rodeado, con buenos recursos y con el apoyo total del club. Eso hace que sea todo más fácil.
-¿Cuándo se imaginaba dirigiendo al primer equipo lo hacía en un escenario como el actual?
-La verdad que no. A todos los entrenadores cuando llegan a un equipo les gustaría hacerlo en mejores situaciones pero, por desgracia, y más cuando se está empezando, normalmente estas cosas llegan cuando hay una destitución, en momentos complicados y es cierto es uno de los escenarios de este club más complicados. Pero para eso es para lo que me he estado trabajando mucho tiempo, sé de donde venimos y lo que tenemos por delante. Tenemos que afrontarlo con realismo y con la fortaleza que exige entrenar al máximo nivel. Esto se saca adelante.
-¿Cree que la pandemia les ha pasado quizá más factura que al resto de clubes?
-El año pasado era segundo entrenador y veníamos de hacer una primera vuelta en la que estábamos sextos optando al ascenso a Primera. Llegó la pandemia, confinamiento, nos cambió la dinámica, acumulamos muchos partidos en poco tiempo, muchas bajas… y descendemos. Y esta temporada, cuando llego al equipo como primer entrenador, sumamos cuatro de seis puntos, estábamos implementando ese cambio que queríamos conseguir y justo tuvimos un brote con nueve contagios. Se pararon los entrenamientos, el equipo está tres semanas sin normalidad y prácticamente cuando volvemos, casi tiempo para entrenar, acumulamos cinco partidos en catorce días. Podemos hablar de que nos ha hecho bastante daño y aún la pasada semana hemos tenido dos casos positivos, pero por suerte parece que ya están bien y que van a poder estar los jugadores que han estado al margen. Solo espero que no nos vuelva a lastrar más esta pandemia, más allá de todo lo que ya ha provocado.
«Será un partido muy abierto y disputado»
-Han empezado esta segunda fase con dos victorias y anotando cinco goles, ¿llegan a Riazor en el mejor momento?
-Sí, y si unimos el último partido de la primera fase, que ganamos 5-0, llegamos en un momento en el que se está juntando todo. El equipo está con frescura. Hemos podido dotarlo de la identidad de juego tanto con balón como sin balón que queríamos. Sí es cierto que es el mejor momento, pero por sensaciones a todos los niveles. Sobre todo porque también hemos conseguido que, al margen de la idea futbolística, también porque pensamos únicamente en sacar esto adelante y porque los resultados nos están acompañando.
-¿A qué Dépor espera encontrarse en Riazor?
-Espero ver más al equipo que antes de Langreo había enganchado cuatro victorias consecutivas. Sólido, que apenas encaja y que recibe muy pocas ocasiones. Ya está amoldándose un poco a lo que pide Rubén de la Barrera. Sabemos que es muy fuerte a nivel individual, con una mezcla de jugadores veteranos y con juventud, que trata muy bien el balón, con mucha movilidad, que sabe trabajar distintos registros en un mismo partido dentro de la idea base que tiene. Estoy seguro de que será un partido muy abierto y disputado.
-Son un equipo que concede muy pocos huecos al rival y que no se complica cuando tiene el balón. ¿Es la filosofía que mantendrá ante el Deportivo?
-Trabajamos distintos registros. En la primera fase, aunque es cierto que ahora estamos teniendo rivales que nos disputan la posesión del balón, nos han cedido la iniciativa en el juego. Y ahora nos hemos tenido que adaptar, pero el equipo está cómodo. Más que una idea concreta de juego, sí quiero a un equipo fuerte en lo defensivo, con atrevimiento cuando tiene el balón y con mucha personalidad. Esas son las tres bases de lo que quiero que el equipo muestre en Riazor.
-Restan cuatro jornadas y la clasificación está en un puño. No hay margen a despistes. ¿Es la presión un factor positivo?
-Llevamos jugando partidos trascendentales desde hace semanas o meses. El equipo ya tiene muy interiorizado lo que tiene que hacer. No quiero que la presión se palpe en el campo y si lo hace que sea de manera positiva. Son otros los que están por debajo , podemos dar caza al Dépor y estamos donde queríamos estar, dependiendo de nosotros, que es lo principal.