El entrenador blanquiazul otorga a la afición un papel importante en la permanencia lograda frente al Langreo
02 may 2021 . Actualizado a las 21:58 h.Feliz pero sin permitir que su rostro transmitiera ese estado de satisfacción interior que tenía. Rubén de la Barrera disfrutó de su primera gran jornada como entrenador deportivista certificando la clasificación del equipo para disputar la Primera RFEF. Una permanencia en la categoría de bronce del fútbol español que, tras una pésima temporada, puede considerarse como el menor de los males. Y en ese momento de éxito quiso acordarse de los cinco mil que se dieron cita, por primera vez esta campaña, en Riazor y de los que han estado en otras tantas ocasiones, pero que la pandemia les impidió este año empujar como hubieran querido.
«El Dépor necesita a la gente y la gente necesita al Dépor. De hoy, me llevo esto», manifestó el entrenador blanquiazul en su primera intervención tras el encuentro.
En cuanto al éxito cosechado, echó mano de discurso constructivo para reforzar al equipo: «Estoy muy contento por el grupo de jugadores en una temporada en la que hemos atravesado muchas vicisitudes. Llegamos a la segunda fase con cierta ventaja, pero ha habido dos equipos, como el Racing y el Numancia, que han sumado mucho y otros dos, como el Marino y el Langreo, que no lo han puesto fácil.. Finalmente, hemos logrado un objetivo que ojalá el día de hoy, por la forma en la que nos hemos clasificado, sea un paso adelante en la historia próxima del club», sentenció.
Una historia próxima en la que, si nada se tuerce, seguirá teniendo su espacio Rubén de la Barrera. Aunque él continúa mostrándose muy cauto al respecto: «No es tiempo para pensar todavía en eso. Hemos dedicado muchas horas de entrenamiento y convivencia para lograr esto. A partir de ahora podremos valorar cosas y estoy un poco en lo dicho en la previa. Me encuentro en un club que, independientemente de la categoría, es muy grande, con una masa detrás limitada por la pandemia. Uno se siente pero que muy entrenador en momentos así», se limita a comentar. Repreguntado al respecto, admitió que «hay algo que era importantísimo, confirmar la plaza en la Pro. Ahora, va a tocar hablar de cosas», avanzó.
Y llegados a este punto, insistió en su continuo guiño a la hinchada: «Juegas en casa. Desde un primer momento percibes y sientes que estás en tu casa. Hay gente. Cuando venían quinientos, se notaba algo; luego vinieron mil, y un poco más. Pero en esta ocasión, ya con cinco mil, gente en todas las gradas... Conociendo la situación actual, se ha venido a demostrar la pasión que se siente por este club. Es un factor diferencial. Jugar en Riazor es diferente. Te dispara el rendimiento. Empuja y ayuda a lograr los puntos de tres en tres».
Y con ese apoyo, el Dépor consiguió viajar a Soria con los deberes hechos, algo que Rubén de la Barrera advirtió que no será sinónimo de relajación. En este sentido quiso tranquilizar al Racing: «Me siento comodísimo yendo a Soria así. Pero esto no ha terminado. Era vital solucionar esto antes del último partido. Pero el compromiso está ahí», sentenció.