El exfutbolista, que esta última temporada entrenó al Fabril, pidió la rescisión de su contrato después de cumplir una única campaña de las tres que había firmado
30 jun 2021 . Actualizado a las 22:52 h.Sorpresa en la cantera del Deportivo. Cuando aún no se había apagado la fiesta tras la brillante Copa de Campeones conquistada por el Juvenil A, Juan Carlos Valerón comunicó al club que deja el banquillo del Fabril, el último escalón formativo antes del salto al primer equipo. El exfutbolista, que hace solo unos días cumplió 46 años, se refirió a motivos personales, que ninguna de las partes han aclarado. Según la nota publicada ayer por el club, este «en atención al carácter de la petición, y viniendo de una persona y profesional ejemplar como el caso de Juan Carlos, ha accedido a la misma dando todas las facilidades para que se pueda resolver el contrato de forma inmediata en los mejores términos para ambos». El exfutbolista dice adiós después de que apenas cumpliese la primera de las tres temporadas del contrato que había firmado el pasado verano con la directiva que presidía Fernando Vidal.
Valerón dio entonces el paso de regresar al Deportivo junto a Fran como estandartes de la dura regeneración que el club está acometiendo después del descenso a Segunda B, y en medio de las incertidumbres propias de la pandemia. El ídolo canario asumió el banquillo del filial deportivista junto a Manuel Pablo, al que le une una gran amistad, y del que ahora se desconoce cuál será su nueva función. La experiencia del Flaco como entrenador se había concentrado en el Las Palmas, donde formó parte del cuerpo técnico del primer equipo y ocupó distintos cargos en la cantera. Incluso había sido seleccionador canario en categoría de cadete.
Su regreso a A Coruña, donde completó los años más brillantes de su trayectoria deportiva, se convertía en un intento del club por conseguir una identidad propia, así como un espejo en el que el Deportivo deseaba que se reflejasen las promesas de la cantera. En las trece campañas en las que el Flaco había impulsado la ola de Riazor, el Dépor conquistó la Copa del 2002 y dos supercopas. El exfutbolista disputó en el Deportivo 422 encuentros oficiales, una cifra que lo sitúa en el cuarto puesto de la clasificación histórica, únicamente por detrás de Fran, Manuel Pablo y Mauro Silva. Además, 289 partidos lo destacan como el sexto jugador que más veces vistió la blanquiazul en Primera División.
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Competición
La primera temporada de Valerón en el Fabril acabó sin pena ni gloria el pasado 9 de mayo, después de clasificarlo para disputar la nueva Tercera RFEF. Sus mayores éxitos radicaron en el paso adelante dado por jugadores como Villares y Rayco, quienes en el mercado de enero ascendieron a la primera plantilla, a la que dieron un impulso decisivo para salvar el curso con la permanencia en Primera RFEF. También Adri Castro alternó la Segunda B y la Tercera División, mientras otros como Manu Mosquera, Barba o Iván Guerrero dispusieron de minutos. Al acabar el curso, Pablo Brea, que compartió minutos con Alberto Sánchez en la portería, dio el salto al equipo principal.
En el aspecto competitivo, al filial no le llegó para jugar de tú a tú con los equipos que lucharon por acceder directamente a la Segunda RFEF. Después de la primera fase de campeonato, se clasificó en el grupo de promoción, pero tampoco alcanzó el play off final por la tercera plaza de ascenso.
Gilsanz y Manuel Pablo, alternativas
La marcha de Valerón abre la carrera por ocupar su puesto en el Fabril. Manuel Pablo ejerció como ayudante del Flaco al frente del filial, un cargo en el que el exfutbolista del Dépor acumula ya varias temporadas de experiencia a las órdenes de distintos entrenadores. Otra alternativa pasaría por el ascenso de Óscar Gilsanz, quien llegó al Juvenil A el pasado verano, después de que Albert Gil lo reclutase para el Laracha, cuando este equipo ejercía como tercer filial del Deportivo. En la temporada que acaba de finalizar, el técnico coruñés viene de conquistar el título de campeón de Liga y, por primera vez en 25 años, la Copa de Campeones. Así, a su experiencia anterior en Tercera División, se une que conoce de primera mano a las promesas llamadas a tomar el relevo en el filial.