Álex Bergantiños: «El deportivismo es un privilegio»

TORRE DE MARATHÓN

CESAR QUIAN

El coruñés declara que es «un honor y un orgullo» que la afición vaya con la misma ilusión a ver un partido del femenino, del juvenil o del primer equipo

14 nov 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Palabra de capitán. Álex Bergantiños (A Coruña, 1985) analiza los cambios experimentados en el Deportivo y el impresionante respaldo de una hinchada que está protagonizando un nuevo renacimiento blanquiazul. La charla se produce antes de la renuncia de la plantilla del Extremadura a jugar en Riazor hoy.

—Para usted esta temporada está siendo una temporada diferente, sin tanta exposición mediática.

—Sí, había algunas rutinas y vicios que no se estaban manejando bien, y por eso nos hacíamos tanto daño entre todos, lo que es el club, la ciudad, la prensa y demás. Se está haciendo todo un poco más ordenado. Se está dando naturalidad a muchas cosas que antes eran mucho más dramáticas, y eso se está notando en el día a día. Todo el mundo participa, el que está jugando más y el que menos, y esa tranquilidad es fundamental para dejar trabajar a jugadores, cuerpo técnico, dirección deportiva, que haya más naturalidad y que se juzgue a final de temporada si se ha hecho bien o no las cosas.

—¿Está sorprendido de lo bien que han empezado la temporada?

—Sí, no era fácil, porque venimos de años duros. El Dépor es un sitio exigente por la categoría en que estamos, por el golpe que nos dimos el año pasado y los que nos llevamos dando estos años. Desde el play off de Mallorca ha sido muy difícil esta cuesta abajo y, por lo menos, la hemos frenado. Ojalá podamos conseguir el ascenso. Se ha mentalizado todo el mundo, tanto internamente como la afición y los medios. Todo el mundo está mentalizado de que la única manera de volver es con tranquilidad y pensando a medio plazo. Ojalá sea lo antes posible, este año, pero al final tenemos que darnos cuenta de que esto es deporte, que la situación del club es estar en el tercer nivel del fútbol español, que casi no entramos la temporada pasada, y que todo el mundo compite, que va a estar en pequeños detalles. Si llegamos igualados a la recta final, tenemos más potencial que nuestros rivales, pero va a estar en pequeños detalles este ascenso.

—¿La mentalidad del club ha cambiado también a la hora de compararse menos con el pasado y disfrutar más del presente?

—Sí, yo creo que sí. Los focos están exclusivamente en el campo, nadie está buscando comparaciones, ni medallas, ni méritos. Simplemente se ha construido un proyecto con el presupuesto que hay y se deja trabajar a medio plazo. Todo el mundo que está implicado quiere que sea lo más rápido posible, pero se ha entendido que la manera de volver es construir y hacerlo a medio plazo. Ojalá este proyecto, que ha coincidido con un buen momento de la cantera, nos ayude a obtener resultados lo antes posible y volver donde el club se merece, pero con paciencia. Si no, es imposible. Nos acabamos haciendo daño entre nosotros, demasiado drama por cada pequeño revés. De eso tenemos que aprender, y tanto la afición como el club, que gestiona el día a día, lo está haciendo de una manera mucho más positiva que los últimos años.

—¿Las palabras clave son humildad, ilusión y hambre?

—Sí, se ha limpiado todo, es gente nueva con una directriz clara de hacer un proyecto a medio o largo plazo, de construir, que sea sostenible también, y no va a ser comparable con nada de lo anterior. Es algo nuevo, y cuando construyes algo nuevo lo más importante es tener ambición, ilusión y hambre. Tanto la gente que toma decisiones como los jugadores que se han firmado van en esa línea de construir, de ganarse con méritos estar más arriba. Que cuando se construya algo sea con gente con voluntad de crecer. En años anteriores siempre estábamos a la sombra del Superdépor, del Dépor de Primera, de volver lo más rápido posible saltándonos etapas y sin adaptarnos a una nueva realidad que nos teníamos que adaptar, y eso nos ha penalizado y nos ha hecho darnos algún golpe más de lo debido.

—¿Cómo se ha unido Riazor al momento del equipo?

—Hay que sentirse muy orgulloso. Tenemos algo que no se ve en ninguna otra parte. Un club como este, en una ciudad como A Coruña, con una masa social como la que tiene, con quince medios de comunicación diarios, un Riazor con 15.000 personas en un partido de Youth League, mi hija aún recuerda el partido de Copa del femenino con 8.000 personas,… que la gente se identifique tanto con unos colores y unos valores… que la gente viaje tanto con el equipo, con peñas por toda España repartidas,… el deportivismo es un privilegio que tenemos y que se está perdiendo en casi todos los lados, así que tenemos que luchar por mantenerlo aquí. Es un honor y un orgullo que la gente vaya con esa ilusión sea el femenino, el juvenil o el primer equipo. Que el Dépor genere tanta pasión y tanta fidelidad es un privilegio al que tenemos que dar mucho valor y cuidarlo. Es lo que mantiene vivo esto, a los que nos gusta el fútbol y a los que hemos vivido el deportivismo desde pequeños. Es muy difícil estar en el tercer nivel del fútbol de tu país y mantener todo esto que se está manteniendo. Es un privilegio y ojalá siga ahí sembrando en las nuevas generaciones.

«Con Borja tenemos un estratega que, además, lo explica muy bien»

Bergantiños elogia a Borja Jiménez como un «entrenador con ambición, hambre y voluntad de crecer en el fútbol». De su forma de dirigir al grupo, el capitán señala cómo ha huido de comparaciones y se ha centrado en los aspectos deportivos de su labor. «Ha construido un equipo reconocible y con una plantilla implicada. Además, con él tenemos un buen estratega y que lo explica muy bien», afirmó.

«Me siento muy identificado con Villares, me recuerda a mi época del Fabril»

El rol de Villares recuerda a Álex sus inicios en el primer equipo. «Me siento muy identificado en él, porque me recuerda muchas cosas, como su capacidad de persistir, competir y adaptarse», señala antes de calificarlo como un ejemplo. «Tiene una edad maravillosa para seguir progresando y compitiendo. Es una esponja y se adapta a todo. Él siempre va a estar preparado, que es lo importante para poder llegar», indica.

«Mackay es un ejemplo de hambre por llegar al club de tu ciudad»

Según destaca el veterano dorsal 4 del Deportivo la llegada de Mackay este pasado verano encaja como un guante en la nueva mentalidad deportivista. «Ian es un ejemplo de humildad, de hambre por llegar al club de tu ciudad, y que eso lo huelan los chicos que andan por los pasillos de Abegondo es fundamental para que se construya un espíritu de cantera diferente al de antes», señala Bergantiños.

«Las edades de la cantera se están acortando en función de los méritos»

El capitán, que afronta su décima campaña en el primer equipo, habla de una cantera con valores nuevos. «En mi época estaba mucho más definido por edad qué jugadores pasaban de categoría. Ahora, por nombrar a alguien, Mella, cadete, juega con el juvenil, o con el Fabril. Barcia, igual. Las edades se están acortando por los méritos. Nadie pide chicos de 15 años, si no dan el nivel. Pero si lo dan, van acortando plazos», dice.