El sadense, que fue internacional sub-19 y formó la superbanda con David Mella en el Dépor cadete, renace en el filial orrelut: «Las cosas me van bien»
17 mar 2025 . Actualizado a las 10:53 h.Por diferentes motivos, el Deportivo lleva mucho tiempo sin producir en su cantera a un lateral izquierdo para su primer equipo, a pesar de que sí ha tenido a jugadores en esa demarcación de enorme talento. Raúl García Carnero (A Coruña, 1989) se tuvo que ir para hacer carrera en e fútbol profesional y, cuando regresó, bajando al barro de Segunda B, fue en su último año como jugador en activo. A Angeliño Tasende (Coristanco, 1997) se lo llevó el Manchester City; a Guille Bueno (Vigo, 2002), el Borussia Dortmund; y a Álvaro Carreras (Ferrol, 2003), el Real Madrid.
Parecía que Manu Berrocal (Sada, 2005) podía terminar con esa especie de maldición que todavía continúa. Era la media naranja de David Mella en la superbanda izquierda que el Dépor tenía en categoría cadete. Un gran rendimiento que lo llevó incluso a la selección sub-19. Pero este verano puso fin a su etapa de blanquiazul, tras un año casi en blanco en el Fabril, y se marchó al Castellón B, en donde es pieza clave. «Estoy muy contento aquí. Las cosas están yendo bien, con minutos, y me hacen sentir un jugador importante», destaca, ilusionado. «Venía de un año sin jugar y al final es lo que busca cualquier futbolista. Recuperar la confianza, volver a encontrarse con uno mismo, y en Castellón lo he conseguido», añade.
El sadense ya ha jugado 23 partidos, en los que además ha marcado un gol; y su equipo está peleando por el título de la Tercera Federación y el ascenso a Segunda: «He tenido mucha suerte en caer aquí. Hay un vestuario muy bueno, de los mejores que he tenido, y eso ayuda mucho. Sobre todo, en mi caso, que estoy lejos de mi familia y de mis amigos. Y en cuanto al club, están haciendo un buen proyecto tanto para el filial como para el primer equipo, así que perfecto. Además noto que confían en mí y eso se ve reflejado».
«Cualquier club profesional quiere que su filial esté lo más arriba posible, para subir el nivel y poder tirar de la gente que hay. Sería algo beneficioso para el Castellón que lo pudiéramos lograr. En verano, cuando se pusieron en contacto conmigo, ya me contaron que estaban haciendo un buen equipo y se está viendo reflejado. Y estamos ahí», añade.
Manu Berrocal firmó el pasado verano por el cuadro orellut, tras rescindir con el Deportivo: «Fue rápido, me dieron confianza y nos decantamos por ellos. Al principio siempre te surgen dudas, porque supone salir de casa, pero yo buscaba reencontrarme conmigo mismo. Era un paso importante el que tenía que dar y mi familia siempre me ha apoyado, así que no tuve ningún problema».
Este lunes (20.30 horas), el excanterano blanquiazul acudirá a Castalia para ver el partido entre el primer equipo de su actual club contra su Dépor. «Me pasaré por allí. Será un partido bonito para mí, con muchos sentimientos encontrados», reconoce. En el estadio podrá reencontrase con David Mella: «Coincidí con varios, pero con el que más fue con él, que es el de mi edad. Ojalá pueda verlo y saludarlo. Últimamente hablamos menos, pero nuestra relación es buena». También jugó con Diego Gómez, «y con Barcia estuve en algún entrenamiento, pero pocos». Además, Gilsanz fue su entrenador el pasado curso.
Berrocal estuvo once años en el Dépor: «Toda una vida. Con muy buenos momentos, y alguno malo, la última temporada». En Abegondo, le marcaron mucho Roberto Veres, Iván Vázquez y Álex Antón. «Viví momentos inolvidables, grandes recuerdos para toda vida», finaliza.