
Denuncia que fijar un concierto en fechas de competición viola el convenio del estadio, y alerta del coste y el tiempo que implican el cambio de césped
16 may 2025 . Actualizado a las 16:00 h.El anuncio de la celebración del concierto de El Último de la Fila en Riazor, en fechas de play off de ascenso a Primera y partidos de la Liga F ha abierto un nuevo enfrentamiento entre el Concello y el Deportivo. El gobierno local fijó el recital para el 13 de junio del 2026 y el club reacciona denunciando las «graves consecuencias» que tiene, y lo que considera continuas mentiras de la alcaldesa, Inés Rey, e incumplimientos del convenio para el uso del estadio municipal. El consejero delegado del Deportivo, Massimo Adalberto Benassi (Pordenone, Italia, 1991), explica su postura y aborda la actualidad de la entidad con La Voz. «El problema principal es que hay una decisión unilateral y una falta de respeto institucional que llevamos viviendo más de un año. No estamos dispuestos a seguir aceptando las mentiras del Concello. Es muy importante que los deportivistas y los coruñeses sepan la versión del club. Lo grave es que el concierto se programa en fechas que, posiblemente, coincidan con el play off, porque, a lo mejor, el Dépor sube directo a Primera y no pasa por play off. La Liga nos confirmó las fechas, y la Liga F también. Allí juega el Dépor, el Dépor Abanca, el Fabril lo hizo la semana pasada y el Juvenil esta. Es un problema muy grave. Si la alcaldesa está harta, nosotros más. El convenio es claro, el estadio solo albergará eventos no deportivos si no afectan a la actividad deportiva».
—Habla de mentiras continuas.
—Hoy [por ayer] ha dicho que en el comité de seguimiento del convenio se hizo mención al concierto del 13 de junio y al artista; y eso es una mentira. En las reuniones de seguimiento del convenio, el Deportivo pide levantar acta, y no tenemos problema en publicarlas, y no se refleja en ningún momento eso. La prueba es que nos lo anuncian el 30 de abril en un correo y no hacen mención a que el tema se hablase en el comité de seguimiento. No podemos seguir aceptando mentiras para juegos políticos que no sabemos a qué corresponden. Nosotros no hacemos política, sino que trabajamos y planificamos una temporada.
—No sabían nada de que el Concello planeaba conciertos.
—Nunca en las actas del comité de seguimiento del 2025 se hizo mención a conciertos. El Concello sabe perfectamente que nuestra preocupación es el estado del césped de Abanca-Riazor. En 42 años se han hecho cuatro conciertos allí. ¿Cómo se puede vender esa mentira de que ahora debe ser un lugar de conciertos?

—¿En qué punto está ahora el tema?
—Nosotros recibimos el correo y lo reenviamos a nuestros servicios legales para que evalúen lo que puede pasar, y hoy [por ayer] el Concello recibió un burofax del Deportivo.
—¿En qué términos?
—Hay que tener un plan de seguridad, de evacuación, garantías que no tenemos ni nadie nos presentó. El convenio establece que en fechas de competición deportiva no se puede hacer otro evento. No se puede decir que se cambia la fecha si hace falta, porque hay un desembolso. Esto se podía haber evitado si en las reuniones de seguimiento hubiera habido diálogo y transparencia. Pero no hay ni respeto ni diálogo ni transparencia con el Concello. Estamos hartos de no poder trabajar ni planificar.
—Tampoco les avanzaron de palabra su idea de los conciertos.
—No. Otra mentira que han dicho hoy es que nos reuníamos con la promotora. Mentira. Nos solicitan por correo una visita al estadio, y preguntamos nombres y asistentes; y no se acredita quién vendría, pero nosotros por cordialidad abrimos, hay gente de seguridad del club que atiende la visita: una cosa es el tema legal y otra la cordialidad. Pero tampoco se nos informa de los detalles de esta visita. Aquí nadie cuestiona que el estadio sea de propiedad municipal, sino que el convenio fija una prioridad deportiva, y se pasa por encima de eso. El estadio es de todos los coruñeses, sí, podemos preguntar si por tres horas de concierto vale la pena semejante gasto.
—Incluso si se mueve la fecha del evento para que no coincida con la competición, ¿por qué es tan perjudicial para el Deportivo que Riazor pase a albergar conciertos, porque el gobierno local habla de que habrá más, de que abre un modelo nuevo?
—Habla de más conciertos, de un proyecto, unas obras... ¿Cuáles? El club no sabe nada de proyecto, de obras... A día de hoy el club no ha sido informado de nada, ni de fechas, ni de conciertos, ni de obras para el estadio. ¿Por qué perjudican los conciertos? Si hay otros eventos en Abanca-Riazor en verano, dejamos a los deportivistas sin pretemporada y sin Teresa Herrera. Hoy [el gobierno local] dice que no se tarda tanto en reponer un césped, pero se refieren a otra tecnología distinta que no aguanta más de una temporada y se repone cada verano; la nuestra es la de un césped cosido híbrido que aguanta diez años con máxima calidad si se realiza un buen mantenimiento. Si se cambia el césped todos los veranos, se necesitan tres meses, y no es posible jugar allí hasta finales de agosto: ni amistosos, ni Teresa Herrera, ni los primeros partidos de Liga. Se plantea derrochar más dinero de forma sistemática. Porque los conciertos, por el peso que conlleva la infraestructura, afectan al césped, al drenaje, al riego... ¿Quién lo paga?
—Se reservan el derecho de emprender acciones legales contra el Concello por los conciertos. ¿En qué términos?
—El convenio es muy claro. Para celebrar eventos extradeportivos se tienen que presentar un informe técnico y no puede afectar a la competición oficial ni extraoficial, y esto afecta al play off y a la Liga F.
—¿A qué instan al gobierno local en el burofax?
—Les indicamos que no sabemos nada de este asunto, y que habrá que ver todo: avales, garantías, responsabilidades, seguros... Solicitamos un protocolo oficial para estas situaciones.
«No hay un proyecto para el estadio, hablamos de la nada»
El choque entre el gobierno local y el Deportivo aviva las enormes discrepancias que afloraron hace ahora un año, a propósito del convenio del uso del estadio y la idea de reformar el estadio para el Mundial del 2030.
—¿Le ha pedido el gobierno local al club o a Abanca que financie la demorada obra de reforma de Riazor para el Mundial?
—No. A nosotros, como club, nos encanta que haya eventos en la ciudad. Nos encanta que venga El Último de la Fila, pero sin derrochar dinero público y sin que el Deportivo sea el perjudicado. ¿Por qué este evento no se hace en otro sitio, que los hay?
—¿Está completamente descartada esa participación del club o Abanca en ese proyecto del estadio?
—Es que no hay un proyecto para el estadio. Hablamos de la nada. Desde que yo asumo la dirección general y cambia el consejo en el verano del 2023, el Deportivo jamás ha visto documentación de este proyecto, nunca se le ha presentado un papel sobre esto. Estamos hablando de la absoluta nada. Este es el problema.
—¿Desde el desencuentro del verano pasado, el gobierno local les ha pedido su opinión sobre la reforma o ideas para ella?
—Nada de nada. No participamos en nada. Solo nos enteramos por la prensa.
—¿Tampoco el aforo definitivo de la reforma o el alcance de las obras en cada grada?
—Nada.
—¿Tampoco les indican cuánto tiempo perderán asientos en cada una de las gradas?
—Nada. Y algo muy importante, nosotros queremos trabajar, no hacemos política, no se puede vender motos a los ciudadanos. Nosotros no nos vamos a meter en su gestión, pero si sus declaraciones nos afectan, tenemos que salir y decir lo que pensamos. El Dépor representa a decenas de miles de abonados, y se ven afectados su afición, el turismo y el club. Perjudicar al club es perjudicar a la ciudad.