Bruno Saavedra «El que venga este domingo a Riazor no va a ver solo un partido, se lo va a pasar bien»

La pasada temporada no tuvo suerte con las lesiones y en la presente le costó un poco cogerle el pulso a la competición. Pero Bruno Saavedra (Santiago, 2005) ha conseguido alcanzar su mejor momento cuando el equipo más lo necesita, en la recta final del campeonato El viernes, frente al Reus, fue el hombre que abrió la lata cuando el Liceo perdía 0-1. De cara a este domingo (12.30 horas, Hockey Global) aguarda otro partido tenso, de emoción, y en el que promete diversión a todo el que se acerque al Palacio.

—Los «play-off» le llegan en un buen momento.

—Sí, creo que estoy ofreciendo una buena versión de mí pero puede ser todavía mejor. Hay que tener en cuenta que el año pasado tuve una lesión y esta temporada afronté momentos complicados. Pero he estado trabajando para que se diera el llegar a un buen nivel y estoy contento, pero, insisto, se puede mejorar.

—¿En qué cree que puede superarse?

—En muchas cosas. Es difícil, por no decir imposible, alcanzar la perfección. A mí me toca trabajar duro cada día, en cada entrenamiento, hacer caso de lo que me dice el técnico para seguir progresando. Soy joven y me queda mucho camino por recorrer.

—Joven, pero está en todas las pugnas. En pelea pocos pueden presumir de, ya no superarlo, sino igualarlo.

—Eso sí es así. En intensidad y tensión no me gana nadie. Voy a cada bola como si fuera la última. Y creo que debe ser así. Luego puedes estar más o menos afortunado, pero tienes que darlo todo en la pista.

—¿Cómo fue ese momento en el que puso el 1-2 en el marcador en el primer partido del «play-off» de semifinales?

—Pienso que el resultado estaba siendo injusto. No estábamos jugando mal, pero no encontrábamos el gol y, bueno, esta vez me tocó a mí abrir el marcador. Fue un tanto que necesitábamos para creer en la remontada y, al final, sirvió. Y qué le voy a decir, pues que mola mucho cuando uno mete un gol así importante y más con el ambiente que había en el Palacio de los Deportes.

—Algo más de dos mil personas, pero todavía se puede mejorar, ¿no?

—Sí. Yo estoy muy agradecido a todos los que están viniendo a los partidos, que cada vez son más. Se nota también que llegan los momentos decisivos de la temporada. Y espero que en el segundo encuentro todavía haya más gente. Poco le podemos pedir a nuestra afición. Porque no reprocha nada y siempre está ahí. Pero yo invitaría a que se acercara más gente todavía, porque sé que volverán. El que venga hoy al Palacio no solo verá un partido, también se divertirá.

—¿Y sufrirá como el viernes? Porque qué tensión hasta en los penaltis.

—Sí. Se dio el partido así. Pero en la pista notamos mucho ese calor que llega desde la grada. Si no fuera por esta gente, es posible que no lográramos la remontada y ganar en los penaltis.

—Decía su entrenador, Juan Copa, que la clave de la eliminatoria no iba a estar solo en lo físico sino también lo mental. Se ha demostrado.

—Al final, lo que nos ha hecho ganar es el ambiente y la mentalidad. Que te metan un gol a pocos segundos del final... Fuimos con el cinco para cuatro y confiamos. Ahí estuvo la clave. En la unión y la mentalidad con la que afrontamos esos instantes. Todo el partido. Fue increíble.

El duelo se adelanta a las 12.30 horas por petición del Reus Deportiu

Después de cincuenta minutos de partido, una prórroga de diez y veinte penaltis lanzados, el Liceo y el Reus Deportiu volverán a verse las caras este domingo en el Palacio de los Deportes de Riazor en lo que supondrá el segundo duelo del play-off de semifinales por el título de la OK Liga. Aunque el encuentro estaba programado para la una de la tarde, el conjunto catalán pidió adelantarlo para ajustar el horario de regreso a Cataluña, algo a lo que los coruñeses accedieron a jugar a las 12.30.

Será otro partido reñido en el que, al igual que hace Bruno Saavedra, su entrenador, Juan Copa, pone énfasis en la importancia de que el Palacio presente un ambiente cálido y favorable a su equipo: «Es que no se le puede pedir más. Defendemos y atacamos siempre con uno de ventaja. Este año nuestra afición está siendo, más que nunca, un jugador añadido», expresa el técnico antes de la cita dominical.

Sobre el partido disputado el viernes, Copa lamenta haber sufrido tanto, porque entiende que el Liceo fue lo suficientemente superior al Reus como para llevarse la victoria: «Era un partido que podíamos haber ganado 5-1, tranquilamente, pero esto es la maravilla de nuestro deporte. El hockey tiene estas cosas. No nos entró la bola y sufrimos más de lo que deberíamos. Luego llegaron los penaltis y, bueno, ahí estamos, por delante en la eliminatoria», explica.

De cara al encuentro de hoy, anuncia que su equipo tendrá que hacer otro sobreesfuerzo —será el tercer partido que juega en cinco días—, por lo que aquellos jugadores que menos minutos estuvieron en pista el viernes gozarán de mayor protagonismo: «Es lo bueno de ser un equipo».

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