
El Deportivo y Gilsanz están pendientes de una reunión para evaluar la situación y las posibilidades del técnico, pero todo apunta a un fin de ciclo
01 may 2025 . Actualizado a las 05:01 h.Se acaba algo más que una temporada para el Deportivo. Riazor prepara este domingo (18.30 horas, Movistar+ y LaLiga TV Hypermotion) el cierre de curso, con aroma a fin de ciclo, contra un Elche que se juega el ascenso directo a Primera División. Confirmada la permanencia blanquiazul en la élite, la consolidación y el crecimiento del proyecto llaman a despedir la campaña con orgullo y abordar nuevas decisiones. Una de las más importantes señala al banquillo blanquiazul. Óscar Gilsanz, incorporado al primer equipo después de una larga etapa en la cantera de la entidad, ha cumplido en 30 partidos la labor encomendada. Ahora, en una próxima reunión, analizarán juntos la situación y las posibilidades que se abren para ambos.
El club llevará a cabo junto al técnico una reflexión profunda de la temporada que finaliza. El análisis no se ceñirá a la Liga que concluye. Todo estará sobre la mesa: la visión personal del entrenador, los rendimientos individuales y colectivos de la plantilla que ha dirigido, la metodología empleada a lo largo de la competición, así como, por supuesto, las necesidades que se plantean y la visión de futuro que el betanceiro tiene de los próximos pasos a dar.
Esta cita entre las dos partes fue reconocida por el propio Gilsanz el pasado viernes en su comparecencia pública previa al encuentro contra el Elche: «No vamos a hablar nada hasta la semana que viene —dijo—. Hablamos diariamente, semanalmente de temas de club, de esta temporada, situaciones de la que viene... pero sin abordar ninguna situación en lo que se refiere a la figura del entrenador. Mi situación no es importante. Cuando pase el domingo, empezará a dilucidarse. Yo no me marco ningún plazo, ni para bien, ni para mal. No sé si será mi último partido, no tengo ni idea. Uno tiene que trabajar como si fuera a estar toda la vida, aunque mañana estés fuera», señaló el preparador.
La decisión no está tomada y el banquillo del Deportivo sigue abierto para Gilsanz que, sin embargo, no es la única opción en la mente de los responsables de la entidad. En su estreno en el fútbol profesional, el técnico ha completado las 29 jornadas previas a esta con un balance de 11 triunfos, 10 empates y 8 derrotas, pese a que por primera vez en todo el curso los tres resultados más recientes han sido negativos, tras sendos tropiezos contra el Sporting, el Granada y el Zaragoza. Hace un mes que el equipo coruñés consumó la permanencia y, casi al mismo tiempo, se despidió de algunos de los futbolistas cuyo rendimiento resultó crucial en la meta conquistada. Unos por lesión (Ximo, Barcia, José Ángel y Mella) y alguno por sanción (Barbero) han dicho adiós con anticipación a la temporada del regreso a la categoría de plata y tampoco se van a encontrar en el césped contra el Elche.
Mientras el cuadro levantino afronta los 90 minutos soñados del curso, con la máxima categoría al alcance de la mano, desde la óptica blanquiazul el partido de Riazor estará marcado por las despedidas y el afán por labrar el camino para que la próxima temporada el protagonista por el ascenso sea el propio Dépor. El proyecto del club pasa por dar un salto en la exigencia, un cambio de nivel que no afrontarán todos los que acaban este curso llamado a la consolidación, pero también todo un examen de ambiciones, compromisos y valías.
El partido para Óscar Gilsanz puede ser el de otro adiós más, como los ya confirmados de Pablo Martínez y Jaime Sánchez, o solo la ratificación de un trabajo que seguirá su curso la temporada que viene. La cita que mantendrá con el club tendrá la solución, pero hasta entonces el aroma a despedida y cambio de ciclo impregna la última jornada de la temporada.
Alineaciones
Deportivo: Germán; Petxarroman, Pablo Vázquez, Martínez, Obrador; Diego Villares, Patiño; Diego Gómez, Mario Soriano, Yeremay; y Bouldini.
Elche: Dituro; Álvaro Núñez, Affengruber, Bigas, Salinas; Nico Fernández, Febas, Nico Castro; Germán Valera, Óscar Plano o Mourad y Agustín Álvarez.
Árbitro: Sesma Espinosa (Comité de La Rioja)
Estadio: Abanca Riazor.
Horario: 18.30 horas, Movistar+ y LaLiga TV Hypermotion.
Una terna de candidatos se perfila antes de tomar la decisión final
A la espera de la referida reunión entre sus responsables y Gilsanz, el Deportivo no se detiene. El director de fútbol, Fernando Soriano, peina el mercado de entrenadores y evalúa ya otras posibilidades en busca de la mejor decisión. El propio Soriano elevará su propuesta al consejo, que seleccionará al elegido entre los tres que proponga el responsable deportivo de la entidad. Los currículos de Sergio González, Luis Carrión y Antonio Hidalgo se encuentran sobre la mesa.
El primero (Hospitalet, 1976) es de sobra conocido por el deportivismo, pues ganó con la blanquiazul los dos últimos títulos: la Copa y la Supercopa del 2002. Por tanto, el conocimiento de la casa y del entorno juegan a su favor, al igual que su propuesta futbolística. Como entrenador se sentó en Primera en los banquillos del Espanyol, el Valladolid (con el que también ostenta un ascenso a esta división) y el Cádiz. Dejó el equipo gaditano en enero del 2024.
Carrión (Barcelona, 1979) también fue futbolista, aunque en su caso no dispuso de oportunidades más allá de Segunda, donde jugó con el Nàstic de Luis César. En los banquillos de la élite, sin embargo, acumula más de 200 partidos con el Córdoba, el Numancia, el Cartagena y el Oviedo. Desde una metodología contrastada, y un fútbol considerado más defensivo, este mismo curso se estrenó en la máxima categoría con el Las Palmas, donde dijo adiós al cabo de nueve jornadas.
Hidalgo (Granollers, 1979), que como futbolista se formó en La Masía y militó, entre otros, en el Tenerife, el Málaga y el Osasuna, acaba de despedirse tras dos temporadas prácticamente completas de un Huesca que gustó por su ambición y fútbol de toque. Anteriormente había preparado al Sabadell y el Sevilla Atlético.