José Manuel Jésus de Pereira disparó a quemarropa con su escopeta recortada a Miguel Sánchez Beiro, Micky, en el poblado de As Chabarras, en Beade, durante una reyerta entre clanes gitanos. La víctima murió en el acto. Al parecer, éstos mantuvieron poco antes una discusión en un bar. Ambos acusados tenían antecedentes por tráfico de droga. El acusado, vigués de origen portugués, estaba acusado de haber perpetrado otro crimen en un molino ocho años antes. La Quinta Sección de la Audiencia de Pontevedra en Vigo tramita tres juicios por supuesto asesinato y que tiene previsto celebrar antes de que finalice el año, puesto que la Justicia obliga a acelerar los trámites cuando los reos están en prisión. Se trata de dos juicios por jurado popular y un sumario. Los tres reos están bajo los cargos de supuesto asesinato u homicidio. La Audiencia recibió ayer el sumario por el acuchillamiento de Rubén Villar en la discoteca Ramallosa 2000 de Nigrán. Privisionalmente, el fiscal había pedido para el imputado, Edelmiro Fernández Rial, una condena de 19 años por sesinato u homicidio consumado de Villar y otros 12 años por el asesinato en grado de tentativa por las heridas causadas a un portero. La acusación también pedía 120.000 euros de indemnización para los padres de la víctima y una compensación para el portero herido. El escrito inicial no contempla atenuantes por drogodependencia, pese a que el reo alegó estar bajo los efectos de estupefacientes. El juicio se iba a celebrar por jurado pero, al haber un herido, el proceso se transformó en sumario. La Audiencia tiene ahora que calificar de nuevo. El segundo juicio en trámites abordará el crimen de Miguel Sánchez Beiro, Micky, presumiblemente a manos de José Manuel Jesús de Pereira, quien el 22 de febrero de 2002 le disparó en el estómago con una escopeta recortada. La pena a la que se enfrenta el reo por asesinato oscila entre los 15 y 20 años de cárcel. Un jurado popular decidirá si el imputado es culpable. Prófugo La única vista que ya tiene fecha es el apuñalamiento del ourensano Antonio Alvarado Pérez a las puertas de la discoteca viguesa Emporio el 14 de abril de 2001. El imputado Luis Alfonso Casal Milego fue detenido en Valencia un año después, protegido por una red de prostitución. El juicio se celebrará el 20 de octubre. El fiscal pidió que se condene a Milego a un mínimo de veinte años de cárcel.