SUCEDIÓ EN 1954
30 ene 2004 . Actualizado a las 06:00 h.La revelación de que en territorio de Estados Unidos existía una fábrica de bombas de hidrógeno era un eslabón más que unir a la larga cadena de la guerra fría, iniciada ya en 1946, cuando Winston Churchill advirtió, en la Universidad de Fulton (Missouri), que un telón de acero se extendía por Europa con varios países satélites de la Unión Soviética. El presidente Eisenhower, que, además, era general, ya había manifestado en varias ocasiones que nunca más Estados Unidos sería víctima de otro Pearl Harbour y que para ello rodearía a sus potenciales adversarios de un armamento que impediría que atacasen por sorpresa. En relación con esta guerra fría, el corresponsal de La Voz de Galicia en Nueva York informaba, a finales de enero de 1954, de una noticia no menos inquietante: en Estados Unidos podrían ser encarcelados y juzgados los comunistas, aunque no hubiese pruebas en su contra. Era la culminación de la llamada caza de brujas iniciada por el senador por Wisconsin Joseph Mac Carthy. Fruto de esta campaña enloquecedora caerían hasta destacados actores de Hollywood, muchos denunciados por su propios compañeros, entre los que se contaba el director Elia Kazan, que no pudo despegarse a partir de entonces de su leyenda de delator.