
Reportaje | Terapias alternativas Un centro de estética ofrece tratamientos basados en el empleo de derivados del cacao y de uvas de La Rioja para mejorar el estado físico y anímico de los clientes
09 mar 2007 . Actualizado a las 06:00 h.El vino y el chocolate no sólo agradan al paladar, sino que también son muy saludables cuando se aplican directamente sobre el cuerpo. El centro de estética de Nieves Durán en Nigrán (Estrada pola Vía, 118) ha incorporado estos dos productos gastronómicos dentro de su oferta de tratamientos corporales. María Rey Durán, una de las responsables del establecimiento, afirma que sus clientes experimentan rápidamente los efectos beneficiosos de la chocolaterapia y de la vinoterapia. «Los resultados no sólo se aprecian a nivel físico, sino que también resultan positivos desde un punto de vista psicológico y emocional», afirma. Las especialistas utilizan productos derivados de caldos de La Rioja en las sesiones de vinoterapia. Masaje El tratamiento comienza con un masaje con aceite natural de pepitas de uva para iniciar la relajación y prosigue con la aplicación de un gel de uva exfoliante y de fango de uva, que combina las propiedades del barro y del vino. Las sesiones duran hora y media, y quienes las han probado dicen que mejora el aspecto de la piel, evita la flacidez, es hidratante y revitalizante. «Además proporciona elasticidad y firmeza y fortalece todo el sistema cardiovascular, mejorando la circulación y proporcionando una sensación de bienestar y de relajación», afirma María Rey. Igualmente beneficiosos resultan los tratamientos de chocolaterapia. Las especialistas del centro de estética aplican primero un masaje con un preparado de cacao por todo el cuerpo, que posteriormente envuelven con una capa de chocolate que llega a alcanzar una temperatura de 45 grados. Después tapan a los pacientes con una manta eléctrica durante 30 minutos para que surtan efecto las propiedades curativas del chocolate. Los masajes con este alimento son un buen remedio para mejorar el humor. La cafeína que contiene el cacao produce un efecto estimulante y hace que aumenten los niveles de endorfinas, sustancias naturales asociadas a la felicidad, entre otras reacciones. «El chocolate es además un excelente hidratante, nutre la piel y frena el envejecimiento», afirma la responsable de este establecimiento que abrió sus puertas al público la semana pasada. Una sola sesión basta para sentir los efectos beneficiosos del vino y del chocolate, sin bien el centro de estética recomiendan un tratamiento continuado para optimizar los resultados. El coste de cada sesión de hora y media es de 40 euros, una inversión para mejorar la salud y el estado de ánimo gracias a unas terapias que son novedosas en la comarca de O Val Miñor.