A Guarda consigue el primer albergue para la Ruta Monacal y Tui, el segundo

La Voz

VIGO

19 mar 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El Consello de la Xunta aprobó ayer una inversión de 1,3 millones de euros para abrir 32 albergues temporales para peregrinos en el Año Santo. Entre los 32 acuerdos ya cerrados con concellos, figura el de Tui, donde se habilitará un segundo albergue en la parte municipal del antiguo convento de Santo Domingo, otro en Redondela y, el primero de la Ruta Monacal, en A Guarda.

El proyecto pondrá además en valor el antiguo colegio Rodríguez Sinde. Una especie de deuda dada la dedicación tanto del profesor al que debe su nombre como a la ciudadanía, que ayudó a escribir sobre este escenario parte de la historia reciente de la localidad.

Antigua escuela

Según explicó ayer el estudioso de los archivos gallegos, José Antonio Uris Guisante, que también fue uno de los guardeses que pasó por las aulas de este centro educativo, su historia siempre estuvo relacionada con la educación y la cultura. Primero fueron las Escuelas Graduadas de Primera Enseñanza, recuerda. Corría el año 1893 cuando Manuel Rodríguez Sinde tomaba posesión de su plaza como maestro, «con un salario de 1.100 pesetas al año».

Uris Guisante resalta que «fue el primero que implantó voluntariamente clases nocturnas para niños que trabajaban». «Primero, de forma gratuita y después con una bonificación anual de 600 pesetas. Llegó a tener hasta 54 alumnos, repartidos en distintos cursos», añade.

Manuel Rodríguez Sinde aún impartía clases en el año 1924; dedicación que tuvo que abandonar debido a una hemiplejia.

Cruz de Alfonso X

El maestro se ganó tanto respeto y afecto que, «por suscripción popular, el pueblo y la corporación local solicitó la Cruz de Alfonso X «El Sabio», que le fue concedida al ilustre profesor. El centro, «totalmente anticuado, al que acudíamos más de 200 alumnos, se declaró en ruinas». El nuevo colegio, ya como Rodríguez Sinde, fue inaugurado en 1966, siendo alcalde José Luis García, pero «a los pocos años se quedó pequeño». Uris explica que «los 3.300 niños de preescolar carecían de atención suficiente y entre el 8 y el 10 sin escolarizar».