Catalá y Jonathan Vila sumaron 18 encuentros jugando juntos en el centro de la zaga
VIGO
David Catalá y Jonathan Vila estaban formando la pareja de centrales más estable que ha tenido el Celta las últimas temporadas. Siempre ha habido problemas para que la misma pareja pudiese tener continuidad, bien por lesiones, por sanciones o por simples decisiones técnicas.
El barcelonés y el de O Porriño jugaron juntos por primera vez en la segunda jornada del presente campeonato de liga, y desde entonces han jugado siempre en esa posición. Son 18 partidos consecutivos formando el dúo en el centro de la zaga.
El año pasado, sin ir más lejos, ninguno de los cinco centrales que había utilizado Eusebio superó la cifra de 27 encuentros como titular en toda al liga. Solo Catalá y Noguerol habían superado los veinte encuentros, y no en todos hicieron ellos pareja.
Una pareja inesperada
Este año Paco Herrera ha encontrado un dúo totalmente inesperado, incluso para él mismo en pretemporada. De hecho es curioso que ninguno de los dos fue titular en la primera jornada de liga frente al Barcelona B a pesar de estar disponibles. El técnico había apostado por Sergio Ortega y Andrés Túñez.
Sin embargo se dio la circunstancia de que tres días después, en el partido de Copa de Alcorcón, el entrenador celeste hizo rotaciones y apostó por Vila y Catalá. Le gustó más como lo hicieron estos dos a los que empezaron en la primera jornada y en Soria, en el segundo partido de liga le dio continuidad a estos.
La presencia de Jonathan Vila es sorpresiva por partida doble, ya que Herrera ni siquiera contaba con él como defensa más que como un recurso de emergencia si no había otros disponibles. De hecho, en varios partidos de pretemporada, el técnico justificó que le alineaba en el centro de la defensa para poder hacer dos onces que jugasen 45 minutos cada uno, pero que consideraba al de O Porriño como un centrocampista.
Ahora Vila tiene que cumplir sanción por amonestaciones, pero si vuelve a la titularidad la semana que viene, la misma pareja podrá jugar aún muchas semanas juntos si no hay lesiones, porque Catalá solo lleva dos amarillas, una cifra muy baja para un defensa central.