En Cangas retrasa la temporada de playas y en Moaña suspende la Semana do Mar
23 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Los nuevos gobiernos del PP en O Morrazo parecen decididos a que su arranque esté marcado por la austeridad. En Cangas, el alcalde José Enrique Sotelo centró gran parte de sus esfuerzos desde que tomó posesión en buscar el dinero necesario para pagar la nómina de este mes. Asegura que ya logró reunir la mayor parte del medio millón de euros que se precisaba y confía en completar el total esta misma semana. Hoy recibe al director del ORAL y la vez tesorero de la Diputación para tratar de elaborar un plan de previsiones de ingresos para lo que resta de año.
Pero, ahora, otro de los problemas relacionados con la situación económica del Concello está provocando el retraso en la puesta en marcha del plan de playas. Se trata de la deuda que Cangas mantiene con las dos empresas que instalaron el balizamiento de las playas los tres últimos años, lo que provocó sus reticencias ante la petición de que las colocaran de nuevo este verano.
El edil de Facenda, Pío Millán, se reúne hoy con responsables de Segem, la sociedad que instaló las balizas en el 2009 y el 2010. Sotelo afirma que no se izará ninguna de las seis banderas azules que recibirá el viernes de manos de Feijoo mientras no esté totalmente listo el operativo.
En Moaña, el nuevo gobierno trata de organizar, partiendo casi de cero, la programación cultural del verano. Solo cuenta con los tres conciertos ya cerrados, los del programa de la Xunta Camiños da Cultura que intentará adosar a un Festival Intercéltico de urgencia (aunque solo uno de ellos tiene relación con el folk) ya que el anterior gobierno había previsto dejar de celebrarlo, lo que critica duramente el alcalde.
El edil nacionalista Daniel Rodas se había encargado de organizar la programación. Tenía las actuaciones apalabradas y listos los carteles con las fechas, nombres y actos previstos.
Tras la sorpresiva sesión de investidura que le dio la alcaldía al popular José Fervenza, Rodas anuló lo que había organizado. Dice que era una simple propuesta que no había recibido aún el visto bueno de la comisión de gobierno y que optó por dejarle «as mans libres» a sus sucesores.
Hay, efectivamente, nuevos criterios. Según indica la concejala Maika Maya, la pretensión del PP es «desmarcarse» de los del gobierno anterior. Una de las consecuencias será la supresión de la Semana do Mar, el programa estrella del BNG. Rodas estima que será una pérdida «significativa» ya que, dice, expresaba la relación de Moaña con la ría de Vigo y permitía mostrar la creatividad de los moañeses.