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Cambian las calles de Redondela

Luis Carlos Llera Llorente
luis carlos llera REDONDELA / LA VOZ

VIGO

Dos entidades culturales denuncian las modificaciones de la toponimia

26 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Los nombres de calles y barrios han sido modificados recientemente en Redondela, sembrando la discordia. Las asociaciones culturales Alén Nos y el Seminario de Estudios Redondelanos han denunciado los fallos en las denominaciones de muchos lugares que antes se regían por la toponimia tradicional con base en un estudio de la Comisión de Toponimia de Galicia. Los mayores errores se producen en Reboreda, aunque en otros lugares, como Cesantes o San Estevo de Negros, también se detectan. En Negros, por ejemplo, un mismo camino se llama, en un lugar, Veiga do Eido y, en otro punto, Sendeiro de Miróns.

Los cambios en la nomenclatura fueron realizados por la concejala Laura Lago, que era responsable de Interior en el anterior gobierno municipal, según han puesto de relieve Andrés Laxe y Víctor Fuentes, de la asociación cultural Alén Nos. «Imos pedir o novo goberno unha xuntanza para abordar este problema», señala Laxe.

Estos defensores de la cultura tradicional del municipio confían en que el nuevo equipo les reciba en pocos días.

Gonzalo Navaza, profesor de la Universidad de Vigo y miembro de la Comisión de Toponimia de Galicia realizó un estudio pormenorizado justificando la toponimia de Reboreda. Los coautores del trabajo también son Xosé González Martínez, director del servicio de Normalización Lingüística de Redondela, y Xosé Couñago, profesor de gallego en la Escuela Oficial de Idiomas y miembro de la asociación cultural Alén Nós.

Laxe parafrasea a Gonzalo Navaza y asegura que «un topónimo é un monumento construído en palabras e algún deles é máis vello que a catedral de Santiago».

Frivolidad

Laxe califica de «frívolos» a los responsables del cambio erróneo de nombre y aboga por la restitución de las denominaciones tradicionales.

El anterior gobierno municipal gastó 24.000 euros en la rotulación de calles que están equivocadas, según Laxe.

En su exhaustivo trabajo de investigación, Gonzalo Navaza recuerda que el nombre Reboreda procede del latín, roboreta, que es un derivado de robur, es decir la especificidad del nombre del roble o carballo (Quercus robur). Significa, pues, robledal. Es una denominación parecida a la usada en múltiples lugares de la geografía de la Península que hacen referencia a este tipo de árboles, muy extendidos por el norte de España y Portugal.

El nombre Reboreda es un topónimo que tiene más de mil años. En el siglo XIII aparecen escritos que reflejan el nombre de iglesia de Reboreda, bajo la advocación de Santa María y perteneciente al arciprestazgo de Redondela.

Hasta el siglo XIX Reboreda era una parroquia de patronato laico, es decir el hidalgo que mandaba sobre la zona proponía al Obispado el nombre del párroco que debía hacerse cargo de la iglesia.

En el catastro del Marqués de la Ensenada, el ministro que modernizó la Hacienda Pública, realizando un exhaustivo trabajo de valoración de todas las propiedades inmobiliarias, figura como titular del derecho de presentación del párroco, Bernardino Pereira y Prego de Montaos, señor de Reboreda. En aquella época los parrócos gozaban de una saneada economía gracias a magras rentas, así que no es de extrañar que Bernardino Pereira propusiese como párroco ante el obispo de Tui a su propio hermano, Baltasar Ramón Pereira. Así quedaba todo en casa.

De esa época es la actual iglesia de Reboreda, de estilo barroco. Su situación, en un valle junto al río del que obtener fácilmente el agua propició que fuese una de las parroquias más habitadas del municipio, ya en 1752 contaba con 372 casas y 1.362 vecinos.

Gonzalo Navaza señala que el nomenclátor de Galicia recoge ocho entidades de población llamadas Reboreda pero únicamente existe una parroquia con ese nombre, en el Concello de Redondela. Es mucho más común el correspondiente masculino, Reboredo, que se usa en 60 localidades gallegas.