El barril de sangría se encontraba casi lleno a las dos y media de la tarde de ayer; y eso que que era gratis si se llevaba puesta una camiseta con el nombre del patrón. Los alumnos de la Escuela de Ingeniería de Telecomunicaciones celebraron ayer en el campus su efemérides, San Teleco (un muñeco con forma del robot R2D2), con escasa afluencia de público debido el fuerte temporal. La borrasca fue especialmente virulenta en el campus donde llegaron a registrarse 86 litros por metro cuadrados y fuertes rachas de viento.
Unos 300 de los mil alumnos de la escuela acudieron a celebrar la fiesta que tuvo lugar en dos carpas que aguantaron los embates del temporal. La celebración tuvo una faceta solidaria. A los que donaron sangre durante la semana les regalaban la camiseta conmemorativa .
Los agentes de la empresa de seguridad Prosegur hicieron patente su presencia para evitar actos vandálicos. En esta ocasión el botellón alternativo, que tuvo lugar en el edificio Miralles, resultó menos problemático que en otras fiestas universitarias.
El pregón de la fiesta estuvo a cargo del mago coruñés Román García, que improvisó un monólogo sobre las comunicaciones en el que se palpó la impronta del artista Luis Piedrahita. «Somos muy amigos y me ha sugerido algunas ideas», señaló Román, que dejó absortos a los presentes con su capacidad para los juegos de cartas.
Como otros años hubo competiciones de proresores y alumnos. En fútbol ganaron los estudiantes por un gol a cero y en el Trivial, los docentes.