Louzán asegura que hubiera invertido el doble en Vigo si el alcalde colaborase

M.J.F

VIGO

El presidente de la Diputación hizo ayer un balance.
El presidente de la Diputación hizo ayer un balance. m. moralejo< / span>

28 dic 2011 . Actualizado a las 11:51 h.

Rafael Louzán lo pudo decir más alto pero no más claro. La inversión de la Diputación provincial en Vigo entre los años 2007 y 2011 ha sido de 30 millones de euros, pero pudo ser del doble si el alcalde hubiese prestado su colaboración. En concreto, calculó que se habrían invertido casi 25 millones en Navia y 5 en el antiguo colegio Alemán, del que aún está esperando el proyecto.

Para dar una idea de que lo que pasa con Caballero es inaudito, explicó que de los 62 alcaldes existentes en la provincia de Pontevedra con el único que tiene problemas es con el de Vigo. Ni si quiera, dijo, con el de Pontevedra, pese a haber enormes diferencias entre ambos, como demuestra el nuevo espacio inaugurado recientemente para la ciudad. «Por lo menos que hubiera diálogo, aunque no nos entendiéramos, pero no lo hay», comentó el presidente de la Diputación, quien recordó que los ciudadanos dan su respaldo para que los políticos se entiendan, no para que estén a la greña y perjudiquen con su actitud a la ciudad. «Él es cada loco con su tema», dijo Louzán refiriéndose a Caballero.

A lo largo de un encuentro informativo con los medios de comunicación, Louzán respondió a los periodistas sobre una posible moción de censura en Vigo que «hasta que se den otras circunstancias es prematuro decir eso». Aunque admitió que lo sucedido en el pleno del lunes, cuando el BNG plantó al gobierno de Caballero, marca un punto de inflexión, reconoció que «no va a ser fácil repetirlo», en referencia a la pinza entre el PP y el BNG que en su día desbancó al socialista Ventura Pérez Mariño, lo que dio la alcaldía a Corina Porro. Cree que ahora los nacionalistas tienen un escenario de incertidumbre a corto plazo y el PSOE algo similar, lo que les lleva a centrarse más en eso. Lo que tiene claro es que «Vigo necesita un gobierno estable».

Sobre la desaparición de las diputaciones, propuesta desde algunos partidos y sectores, reconoció que probablemente haya cambios y que las diputaciones necesitan una reestructuración para adaptarse a los tiempos.

Apostó por evitar duplicidades en las administraciones y avanzó que la Diputación arbitrará en el 2012 un plan de apoyo de 30 millones para los municipios de pequeño y mediano tamaño con el fin de que puedan pagar las nóminas y a los proveedores.