
Ana Pastor inaugura hoy el viaje sin paradas de poco más de dos horas
01 jul 2013 . Actualizado a las 07:00 h.No hace muchos años los responsables políticos vigueses daban por sentado que habría AVE directo a Madrid, por Ourense, y que se pondría en marcha la salida sur ferroviaria para una conexión también directa con Portugal vía O Porriño. La realidad, sin embargo, es que ambas han quedado aparcadas por la crisis y en el caso de la salida sur ha desaparecido de los discursos políticos.
Buena prueba es que hoy se pone en marcha el tren directo entre Vigo y Oporto por la línea tradicional y nadie ha mencionado la proyectada salida sur. El nuevo avance mejorará la conexión entre ambas ciudades, que pasarán de estar enlazadas por ferrocarril en 3 horas y 15 minutos a poco más de dos. Sin duda un cambio sustancial, pero muy lejos de la hora en que podría hacerse en una línea de alta velocidad.
Para que algún día pueda existir sería preciso construir la salida sur, lo que permitiría a los trenes ir directamente de Vigo a O Porriño y desde allí a la frontera sin tener que desviarse como ahora por Redondela. Se trata de una obra enorme que exigiría, de entrada, construir un túnel desde la actual estación hasta las cercanías de la avenida de Madrid, horadando todo el barrio de Casablanca.
Desde la avenida se Madrid tendría que buscar el camino hacía O Porriño, para lo que existen varias alternativas. En algún momento se pensó en construir una estación en Sárdoma y desde allí continuar bajo tierra para atravesar el alto de Puxeiros. Sin duda un proyecto costoso, pero que permitiría que Vigo dejará de ser una estación terminal para convertirse en pasante. Otra ventaja es que abriría la vía a una conexión ferroviaria con el puerto en el área de Bouzas.
La única ventaja de la situación actual es que la estación del AVE se ha diseñado a 15 metros bajo tierra sobre la anterior, lo que permitirá, cuando sea, que prosiga el túnel hasta la avenida de Madrid. De no hacerse a esta profundidad tal opción sería técnicamente imposible.
La idea inicial de construir la salida sur y ahorrar en cada viaje los 17 kilómetros de retornar a Redondela partió del sindicato UGT, que en Vigo está especialmente preocupado por todo lo concerniente a la red ferroviaria. Tras una etapa de varios años en que la idea no encontraba respaldo finalmente fue asumida por los grupos políticos como un proyecto de futuro imprescindible para la ciudad.
Un cambio sustancial se produjo hace cuatro años, cuando Caballero aprobó la propuesta del ministro José Blanco y de sus secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán, para modificar el proyecto existente y evitar las numerosas afecciones que provocaría en la parroquia de Sárdoma. A partir de entonces el silencio vuelve a rodear la salida sur.