El fiscal acepta la absolución de los jefes del astillero Barreras tras su quiebra

El fiscal especial de Delitos Económicos, Juan Carlos Horro, no recurrirá en la Audiencia la sentencia que absuelve a dos directivos del astillero Hijos de J. Barreras de la entrada en concurso de acreedores. El fiscal explicó ayer que, tras estudiar los argumentos del juez de lo Mercantil número 3 de Pontevedra, con sede en Vigo, no ha encontrado motivos que pudieran alegar con éxito si presentase un recurso de apelación en la Audiencia Provincial. Ante las mínimas probabilidades de que prosperasen sus puntos, la acusación pública ha desistido.

Pero todavía queda la baza de la acusación particular, promovida por el armador Fernando Fernández Tapias. El demandante aún no ha agotado el plazo de 20 días hábiles, que se extenderían hasta primeros de octubre. Al cierre de esta edición, no había presentado un recurso.

Si el juez declara firme la sentencia significará el fin de la pesadilla para el expresidente Francisco González Viñas y el ex director financiero, Fernando Vilariño. El titular declaró el concurso como fortuito y les eximió de cualquier culpabilidad por falta de pruebas.

El pleito fue promovido por la Fiscalía al considerar que el concurso debía declararse culpable porque los ejecutivos habrían maquillado las cuentas del astillero y le generaron unas pérdidas de 64 millones. El informe de los administradores concursales concluyó que ese desfase no era malicioso sino que los directivos tenían otra forma de contabilizar los costes que trasladaban a buques futuros para cumplir presupuestos. Cuando se quedaron sin nuevos barcos que construir, se dieron de bruces con la deuda real. Solo uno de los tres administradores se negó a firmar el informe. El juez vio imposible reconstruir la contabilidad y absolvió.

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