
Conquistó al también gallego Yayo Daporta con un carpaccio de corvina
09 sep 2014 . Actualizado a las 22:55 h.Concentrada, silenciosa y feliz. Así se la veía ayer a Inés Abril, la concursante viguesa de la segunda edición de Top Chef. El programa de Antena 3, que ayer se estrenó, seleccionó a doce de los 16 cocineros que presentó a comienzos del programa tras un maratón delante de los fogones.
Para la chef del Maruja Limón, el maratón fue mucho más corto que para la mayoría de sus compañeros, ya que en la primera criba del concurso resultó seleccionada. Fue el también gallego Yayo Daporta, uno de los tres jurados junto a Alberto Chicote y Susi Díaz, quien la eligió como la segunda mejor profesional de la noche.
El reto al que se enfrentó la viguesa fue realizar un carpaccio de corvina, un pescado al que se enfrentó con semblante serio y tranquilo. Su ejecución, que era lo que más se valoraba de la prueba, dejó impresionados a los cocineros.
«Esos ojiños de gallega, tu acento, me llevaste a Galicia- confesó Daporta durante su intervención.- (...) Pero aquí juzgamos platos. Enhorabuena». De este modo, Inés Abril logró el set de cuchillos que la acreditaba como futura concursante de la segunda edición de Top Chef.
¿Quién es Inés Abril?
La joven cocinera que ayer impresionó a Yayo Daporta por su carpaccio lleva ocho años trabajando en Vigo en el restaurante de una estrella Michelín Maruja Limón. Sus primeras prácticas fueraon en el Parador de Baiona, desde donde partió tras ser seleccionada para entrar en el Portal de Etxaurren. Una vez terminados los tres meses de su beca, Francis Paniego le ofrece dos puestos de trabajo pero por motivos personales esta gallega regresa a Vigo. Aquí intenta abarcar también el mundo del dulce entrando a trabajar en la PasteleríaMontserrat y recibe una oferta del Maruja Limón, donde trabaja con Rafa Centeno, al que considera como su mentor.
En el perfil del programa Top Chef la definen como «exigente consigo misma, perfeccionista, muy metódica y bastante maniática de la limpieza», aunque también aseguran que es positiva, alegre y con sentido del humor. Ahora, esta viguesa de 32 años que en el 2002 abandonó su carrera universitaria por los fogones, tiene el reto de ir conquistando al jurado programa a programa para imponerse a sus otros once compañeros.