Pescanova dice adiós a la mayor planta de rodaballo de Europa

VIGO

GUSTAVO RIVAS

La piscifatoría de Mira, en manos de la banca acreedora lusa, ha sido adquirida por la portuguesa Ondas e Versos LDA

03 jul 2017 . Actualizado a las 20:25 h.

Acuinova Actividades Piscícolas o, lo que es lo mismo, el negocio del cultivo de rodaballo de Pescanova en Portugal, está perdido definitivamente. La compañía acaba de anunciar esta tarde la venta de su filial piscícola, instalada en la localidad de Mira, que se encontraba en concurso de acreedores, a la sociedad portuguesa Ondas e Versos LDA por una suma que no ha trascendido. En realida no es la corporación Pescanova quien vende, sino la banca acreedora lusa que, desde hace casi dos años, se hizo con el control de la mayor planta de cultivo de rodaballo de Europa, por una deuda acumulada de 166,64 millones de euros. «Tres de los bancos acreedores portugueses de Acuinova (Millennium BCP, Caixa Geral de Depósitos y NovoBanco) han procedido a la venta de la totalidad de las acciones», ha informado Pescanova en un comunicado en el que explica que, desde el primer momento, el grupo pesquero ha realizado «todos los esfuerzos para defender los intereses de la sociedad y de sus 127 trabajadores, intentando salvar Mira y mantener su actividad». La compañía que preside González Robatto aclara que la cesión de Acuinova "no tiene un impacto relevante para nueva Pescanova, ya que este era un activo disponible para la venta y no figuraba dentro de las cuentas consolidadas del grupo".

 La filial portuguesa siempre fue un project finance. Nació como activo disponible para la venta. Durante los últimos meses, el equipo de Ignacio González ha estado presionando a los bancos portugueses para que tomaran una decisión sobre sus intereses en Mira, dados los infructuosos intentos llevados a cabo para su venta (tanto Mercadona cono Stolt Sea Farm rechazaron la oferta).

 La planta acuícola, concebida por Pescanova con la expectativa de ser la mayor de Europa -lo es en dimensión-siempre ha estado por debajo de su capacidad de producción, como consecuencia de los accidentes provocados por fallos de construcción, que entre los años 2009 y 2014, provocaron más de 70 millones de euros de pérdidas a la compañía. El grupo, entonces en manos todavía del ex presidente Fernández de Sousa, cifró la inversión en Mira en 107 millones de euros, El proyecto recibió 58 millones de euros de fondos públicos portugueses.