El músico vigués ha vuelto a agotar las entradas para este ya tradicional concierto de Navidad
23 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Carlos Núñez emula desde hace años a Bob Dylan en ese afán por realizar una gira permanente que le lleva de ciudad en ciudad, mostrando su música y una manera de entender la relación con el público. De Francia a Estados Unidos, y de Japón a Buenos Aires o a cualquier otro lugar del mundo donde se fomente la sensibilidad musical, Carlos Núñez encadena multitud de conciertos a lo largo del año.
Sin embargo, cuando llegan las fiestas navideñas, el músico vigués cumple con sus tradiciones y regresa a la ciudad que le vio nacer. Y además, ofrece un concierto a todos sus convecinos. Será esta noche.
A partir de las 20.30 horas, Carlos Núñez con sus habituales acompañantes desplegará toda la pasión musical que le impulsa por los escenarios de medio mundo.
El instrumentista y compositor bebe de la tradición atlántica, que muchos califican como céltica. Sin embargo, el músico vigués mantiene abiertas muchas otras puertas para conectar mundos distintos a través de sus músicos.
La ya larga carrera de Carlos Núñez está marcada por reconocimientos importantes. Ahí está el Grammy por el disco grabado con sus maestros The Chieftains; dos nominaciones a los Grammys Latinos; Premio Ondas al mejor directo y el Premio de la Crítica Alemana, Preis diere Deutschen Schallplattenkritik. Además, en sus discos han participaron Luz Casal, The Waterboys, Jackson Browne, Ry Cooder y Roger Hodgson de Supertramp, y ha compartido escenario con primerísimas figuras tales como Bob Dylan, Sinéad O’Connor y The Who. Y es vigués, el músico más internacional que ha dado la ciudad. Desde A Irmandade das estrelas, álbum de debut en solitario, en 1996, hasta Alborada do Brasil, ha publicado diez discos, donde ha incluido composiciones propios y adaptaciones de temas tradicionales. Hoy, es una buena oportunidad para comprobar el estado de forma de la banda de Carlos Núñez, engrasada con infinidad de conciertos repartidos por más de medio mundo.
Y volverá a colgar el cartel que indica que no hay entradas.