Los acreedores piden inyectar capital privado y público en Barreras

L.C.LL. VIGO / LA VOZ

VIGO

M.MORALEJO

Uninaval reclama 20 millones de euros que las empresas auxiiares no han cobrado

11 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Las empresas auxiliares del naval a las que el astillero Hijos de J. Barreras debe 20 millones de euros confían en que se realice un «esfuerzo común» por parte de la Xunta, el Gobierno central y los accionistas del astillero vigués que permita una inyección de capital en la empresa para facilitar el abono de impagos. Uninaval considera fundamental aportar una solución a la situación del astillero ante el «complejo panorama actual» y ha urgido dar respuesta a «los problemas de impagos», que «han llevado a la industria auxiliar a una situación agónica».

En este sentido, considera que si la solución pasa por «un esfuerzo común de las administraciones central y autonómica y de los propios accionistas», este sería «el camino correcto para atajar las problemáticas a las que se enfrenta actualmente un astillero como Barreras», clave y referencia en Galicia y España. Los acreedores insisten en que «todos los instrumentos que se puedan utilizar en este contexto de pandemia serán bienvenidos» si conllevan el pago de la deuda acumulada con la industria auxiliar, que «asciende a más 20 millones de euros».

«Es el momento de apostar desde las administraciones públicas por industrias estratégicas como esta, si no habrá un grave perjuicio para la industria auxiliar y naval», advierte Uninaval. Además, recuerda que el fondo de solvencia «se ha utilizado en otros países competidores directos de la industria naval gallega, como Alemania y Holanda».

Las empresas auxiliares prevén que el sector de los cruceros recupere su actividad a partir del segundo trimestre de 2021, «continuando con la senda de crecimiento exponencial que estaba registrando». Por ello, confían en el proyecto de la propietaria del astillero, Cruise Yacht Upper Holdco y que se puedan construir más barcos de este tipo en el futuro.

Así, las auxiliares afirman que es momento de «solucionar este problema de solvencia» por parte del astillero y «con el apoyo de las administraciones» para saldar la deuda acumulada y «poder seguir impulsando esta industria clave» para el tejido productivo de cara a la recuperación económica.