Qué decide un gran maestro de ajedrez en un concurso de preguntas

m. rodríguez OURENSE / LA VOZ

VIGO

tw la sexta

Iván Salgado participó en el estreno de «Divididos», de La Sexta

17 dic 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Por su trabajo como ajedrecista, Iván Salgado ya había tenido algún contacto con la televisión como medio en el que le hicieron entrevistas, pero el pasado martes el ourensano apareció en la pequeña pantalla como participante en Divididos, un nuevo concurso de La Sexta en el que cuatro desconocidos tienen que colaborar para responder en equipo quince preguntas en tiempo limitado para terminar dividiendo el bote en tres partes desiguales. Iván Salgado formó parte del equipo 2. Se presentó como lo que es: «gran maestro de ajedrez y jugador profesional». «Nunca se me ocurriría escribir para un programa de televisión. Me encontraron ellos. Cuando lo propusieron, por la pandemia no tenía tantos torneos, y lo pensé y me dije ‘‘¿por qué no?''. Parecía un enfoque interesante, porque el ajedrez es individual y en el concurso primero hay que luchar en equipo y luego como rivales. Intentas ayudar lo máximo posible hasta llegar al final y luego cada uno busca su estrategia, porque hay que repartir el dinero a partes desiguales», explica Salgado sobre la dinámica del juego.

El ajedrecista eligió quedarse con el 60 % del bote, el porcentaje mayor: 438 euros. «Lo de repartir el dinero fue raro porque esperaba algo de lucha. No se me ocurre que una persona no pidiera lo máximo si puedes hacerlo. Para mí es anti climático, pero yo soy súper competitivo», dice sobre su decisión, que fue criticada: «Yo no sigo las redes sociales pero me mandan cosas los amigos. Y es gracioso y significativo que en España, en un concurso en el que el objetivo es ganar, cuando ganas te critican», observa.

«Fue interesante ir al programa para saber cómo funciona y cómo se busca; está todo premeditado de antemano buscan crear efecto en la audiencia», afirma.

El programa se grabó hace unos meses. Iván Salgado considera interesante su participación aunque, reconoce, la temática de las preguntas, «no era la mía. Si no te pasas el día viendo la tele es muy difícil saberlas. No había ninguna pregunta de ciencia o de razonamiento, que son las que mejor se me podrían dar. Mis conocimientos no están muy adaptados pero era interesante porque al ser muchas preguntas se podía hacer algo de eliminación. No me puse nervioso pero había preguntas de las que no tenía ni idea, algunas las tenía que razonar con la cabeza fría. Es como el ajedrez, cuando te sorprenden con una jugada en la partida, necesitas controlar para no perder el equilibrio».