
El Chuvi ha secuenciado tres muestras del linaje B.1.617 en marineros del barco que está en cuarentena en el puerto con un brote en marineros asiáticos
03 may 2021 . Actualizado a las 00:47 h.El laboratorio de microbiología del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo ha confirmado este sábado a mediodía que el brote de covid-19 surgido a bordo de un barco está provocado por la variante india del coronavirus. Se han secuenciado tres muestras que tienen el linaje B.1.617 del virus, como se conoce científicamente a la variante que parece haberse hecho predominante en la India coincidiendo con el fuerte repunte de la pandemia. Hay seis contagiados y como todos los casos pertenecen al mismo brote y este apareció a bordo de un barco, un lugar perfectamente delimitado, se da por hecho que todos los casos son de la misma variante del coronavirus y que no se va a extender fuera del barco. Es la primera vez que se confirma en España la presencia de la variante B.1.617.
Cuatro de los contagiados permanecen a bordo del Prometheus Leader, con una clínica leve. Otros dos, de 28 y 67 años, están ingresados en el Hospital Vithas Vigo (Nuestra Señora de Fátima). Ambos están en planta y permanecen estables, según el Sergas. Otras 16 personas permanecen en cuarentena en el barco. Los enfermos no han llegado a pisar tierra. El barco llegó a la ría de Vigo el lunes 26, tras dos días de travesía desde Southampton. En ese momento se evacuó al hombre de 67 años al hospital, porque tenía síntomas compatibles con la infección por el coronavirus. El barco atracó dos días después y se hicieron PCR a toda la tripulación, que permaneció confinada en todo momento. Uno de los marineros fue ingresado desde el buque hasta el hospital.
Antes de ir al Reino Unido, el barco había estado en Alemania y Bélgica. Es habitual que en los puertos se produzcan cambios en la tripulación. En uno de esos cambios, probablemente en Southampton, se incorporaron trabajadores procedentes de la India. Se sospecha que uno de ellos, asintomático, introdujo el SARS-CoV-2 en el barco.
El equipo de microbiología de Vigo ya fue el primero en España que confirmó la presencia de la variante sudafricana, la B.1.351. En las últimas semanas también detectó los primeros casos en Galicia de las brasileñas, la P.1 (la de Manaos) y la P.2 (la de Río de Janeiro). En cuanto a la india, era cuestión de tiempo que llegase. Hay al menos 23 países que han reportado casos de la variante B.1.617. Se esperaba que apareciese. Esta semana, el consejero de Sanidad andaluz generó confusión cuando anunció que había un caso en su comunidad, pero tuvo que autodesmentirse. Además, se estuvo estudiando un caso en Valencia que parecía compatible, pero finalmente se descartó.

«El de la sudafricana era una persona que trabajaba en el naval, la P.1 vino en un marinero de Perú y ahora esta», enumera el jefe de servicio de microbiología del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi), el catedrático Benito Regueiro, «esto implica que los puertos internacionales necesitan una vigilancia importante y que es personal expuesto a la entrada de variantes». Por tanto, dice, «debería vacunarse a la gente del puerto».
En este caso se trata de una variante india peculiar. En la variante india existen tres subtipos (sublinajes). Los tres comparten dos mutaciones que hacen al virus más transmisible. Hay una tercera mutación que podría estar ligada a un escape de los efectos de los anticuerpos, los naturales y los que genera la vacuna. El caso diagnosticado en Vigo es el sublinaje 2, que no tiene la mutación que se vincula a una reducción del efecto de las vacunas.
El problema de la variante india es que coincide en el tiempo con una fuerte expansión de la pandemia en ese país tan poblado y con una sanidad precaria y no se sabe cuánto se debe a la variante y cuánto a la propia situación del país. De hecho, la capacidad de secuenciación de la India es pobre y hay otros países, como el Reino Unido, que ya han detectado muchos casos de esta variante.
En todo el mundo hay sistemas de vigilancia de las variantes del virus. Cuando infectan las células, los virus generan copias de sí mismos. En esas copias aparecen errores, que se llaman mutaciones. Algunas mutaciones dan ventaja a los virus. Cuando empieza a expandirse una versión del virus con unas cuantas mutaciones y se hace fuerte en una zona, hay una variante. Todo esto es normal. Pero hay variantes que tienen mutaciones que pueden ser peligrosas, porque hacen que el virus se contagie más o porque puedan eludir el efecto de las vacunas. En la vigilancia internacional del virus hay dos escalafones: las variantes de preocupación (VOC, por las siglas en inglés, y variantes de mayor impacto en la salud pública para el Ministerio de Sanidad) y las variantes de interés (VOI). Las tres VOC son la británica (B.1.1.7), la sudafricana (B.1.351) y la brasileña (P.1). La india no se ha incluido de momento en ninguno de los dos grupos.
Una prepublicación reciente apunta a que cuando se pone en contacto la nueva variante con plasma de personas ya vacunadas se consigue una buena respuesta. Ese trabajo dice que la respuesta de los anticuerpos se reduce, pero que existe.
