Por qué el rector de la Universidad de Vigo puede perder las elecciones aunque es el único candidato
VIGO
Manuel Reigosa está preocupado por la participación; Salustiano Mato ya fue candidato único y dice que no le gustó
29 abr 2022 . Actualizado a las 23:37 h.La Universidad celebra elecciones el próximo miércoles y solo una persona puede impedir que Manuel Reigosa, actual rector y único candidato, continúe otros cuatro años en el cargo. Es un hombre de 63 años, catedrático de Fisiología Vegetal y que se llama Manuel Reigosa. El rector lucha contra sí mismo. Esta es la primera vez que se podrá votar en contra y, por lo tanto, destituirlo.
Los estatutos de la Universidad dicen que si solo hay una candidatura «esta tiene que conseguir mayor número de votos a favor que en contra». Si Reigosa cosechase más noes que síes, entonces tendría que seguir en funciones y convocar unas nuevas elecciones antes de tres meses. Nada impide que después pudiese presentarse de nuevo.
La primera vez que hubo un candidato único a rector fue en el 2014. Salustiano Mato llevaba cuatro años y quería repetir, pero la oposición —en la que estaba Reigosa— no se articuló en su contra. «Non me gustou nada ser candidato único, é necesario confrontar plans e ideas», reflexiona ahora el catedrático de Zoología. «Eu tiña que debater comigo mesmo e procuraba facer campaña nos sitios onde había xente crítica; grazas a iso, melloramos aínda máis e deixamos a Universidade nunha situación que nunca se soñara».
En aquel momento, no se podía votar que no. Un grupo de profesores de Ourense impugnaron el proceso electoral pidiendo que las papeletas incluyesen el voto en contra. El juzgado desestimó aplazar cautelarmente las elecciones. Al final, solo un 9 % de los más de 22.000 electores acudieron a votar, y Mato cosechó más votos en blanco que a favor: 908 frente a 751.
«Eu estaba dacordo en que se puidese votar que non, pero é que non se podía. Precisamente por iso fixen os novos estatutos, que permiten que a xente exprese a súa vontade», defiende ahora Mato.
La norma de la institución entró en vigor en el 2019. Por ella, el pasado noviembre el entonces decano de Económicas, Jorge Falagán, abandonó el cargo. Era el candidato único y recibió 46 noes frente a 42 síes. El rector tuvo que nombrar directamente un decano provisional.
En el arranque de esta campaña contra sí mismo, Manuel Reigosa recordó las elecciones del 2014, de las que dijo que «o equipo gobernante impediu» que se pudiese votar en contra. Incluso insinuó que en este 2022 «pode haber un cálculo interesado de promover un voto negativo, sen dar a cara, esperando ademais que a mobilización sexa máis difícil ao non haber alternativa». En los campus se espera una baja participación y si un grupo se organizase para votar en contra, podría echar al rector.
Las palabras de Reigosa no eran casuales. El rector y candidato es consciente de que en su oposición hubo movimientos para erigir un rival electoral, sobre todo a raíz del debate sobre si se debían trasladar facultades al centro de Vigo, una idea que su equipo al principio veía con buenos ojos, que generó mucha oposición interna y que finalmente descartó.
El que ya no quiso ser candidato más es Emilio Fernández, vinculado al equipo de Mato y oponente de Reigosa en las elecciones del 2018. «Yo planteé un proyecto en su momento y no fue aceptado; eso está bien, pero sigo teniendo las mismas ideas», concede el catedrático de Ecología; «y con la docencia, la investigación y mi edad [60 años] no tengo las ganas y la energía para meterme en esto otra vez». Por eso renunció a volver a presentarse. Fernández cree que hay poca gente a la que le apetezca aparcar su carrera profesional para meterse en la gestión. «No creo que haya más gente que vote en contra que a favor, pero es cierto que no es fácil motivar para votar si solo hay un candidato», reflexiona.
La solución a esta partida de Reigosa contra Reigosa, el próximo miércoles.