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Las piscinas de Samil reabren, al fin, dos años después

alejandro martínez VIGO / LA VOZ

VIGO

Xoán Carlos Gil

Cientos de usuarios comienzan a usar las instalaciones con la llegada del buen tiempo

11 jun 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Las piscinas de Samil ya están abiertas para que miles de usuarios, sobre todo niños, disfruten de ellas a lo largo de la temporada de verano. Oficialmente lo hicieron el miércoles, pero hasta ayer el tiempo no acompañó para poder darse unos buenos chapuzones. Cientos de niños volvieron a zambullirse en sus aguas saladas que en los últimos años han estrenado un nuevo sistema de depuración.

Las instalaciones no llegaron a llenarse de usuarios como suele pasar durante la temporada alta de verano. Muchos bañistas prefirieron divertirse con las olas de la playa de Samil, que un año más ha vuelto a conseguir la bandera azul como otros diez arenales del a ciudad, una más que el año pasado. Este fin de semana muchas familias ya han previsto visitarlas porque es un espacio idóneo para que los pequeños jueguen sin el peligro de perderse y de una forma segura.

El reencuentro con las piscinas de Samil era muy esperado tras dos años de pandemia en los que estuvieron cerradas. Mientras los principales arenales de la ciudad se dividían en cuadrículas para establecer un aforo máximo, el Concello optó por cerrar las piscinas como medida para prevenir que siguieran produciéndose contagios, dado que aquí era imposible controlar las aglomeraciones.

Muchas personas añoraban que volvieran a funcionar y disfrutar por fin del verano sin las restricciones impuestas durante la pandemia. Por eso, el alcalde, Abel Caballero, anunció hace unos días su reapertura como «una gran noticia».

Las piscinas reabren con todas las garantías sanitarias y de seguridad para los bañistas. Son cinco vasos con un socorrista para cada uno de ellos. De esta forma, el servicio de socorrismo se adelanta en este espacio, respecto a los vigilantes que comenzarán su labor en las playas a partir del próximo 15 de junio.

Una ventaja es que son de acceso gratuito, lo que no suele ser común en este tipo de instalaciones, en las que es habitual tener que pagar una entrada. Funcionarán de manera ininterrumpida todos los días desde las once de la mañana hasta las diez de la noche. Permanecerán abiertas hasta el 30 de septiembre. Una vez entrado en el otoño y con el curso escolar ya iniciado cerrarán sus puertas hasta la próxima temporada.

El alcalde anunció hace un año una iniciativa para convertir las instalaciones en un gran parque acuático con una inversión de más de dos millones de euros. Los vasos seguirán en su ubicación actual pero se remodelarán y mejorarán para que, en conjunto, formen una gran zona de juegos con agua. Su uso continuará siendo gratuito, pero será limitado a los niños.