El polígono Minho Park de Monçao acogerá empresas en enero del 2024
04 feb 2023 . Actualizado a las 00:13 h.Portugal ha desbloqueado el mayor parque empresarial del norte del país a solo 8 kilómetros de la Plataforma Logística Industrial de Salvaterra-As Neves (Plisan). Se trata del Minho Park, un proyecto que comenzó a gestarse a la par que el puerto seco gallego y que también fue de complicada gestación. El espacio luso, de 560.000 metros cuadrados, fue anunciado en el 2010 como el «nuevo polígono empresarial de la eurorregión» e iba un paso por delante. Empezó a atraer el interés de empresas cuando, en el 2016, la Asociación Industrial do Minho (Aiminho), con un 95 % del proyecto (la Cámara Municipal de Monçao tenía el 5 % restante), se declaró insolvente. En la ribera gallega despegaba al mismo tiempo la Plisan como la tierra prometida para muchos empresarios necesitados de suelo inexistente en la raia. El proyecto luso resurge ahora «colocando a Monçao en una posición central entre el norte de Portugal y Galicia», sostiene el regidor de la localidad, Antonio Barbosa.
Esta semana se ha firmado en Oporto la escritura pública de venta de los terrenos a sus nuevos propietarios. Se trata de Destaque Objetivo, una sociedad que culminará el polígono y que prevé que las primeras firmas puedan instalarse en enero del próximo año. Su intención es la de sumar esfuerzos para atraer empresas. Los beneficios fiscales y el precio del suelo acostumbran a hacer estos terrenos más atractivos al sur del Miño. Por eso se han agotado ya los polígonos de Valença o Cerveira, mientras que en Tomiño, O Rosal y A Guarda esperan desde hace dos décadas por planes que nunca se materializaron.
«La Eurocidade Monção-Salvaterra pasará a tener cerca de 500 hectáreas de área industrial disponible para posicionarse en una región que abre cada vez más sus horizontes», manifestó Barbosa a la agencia Lusa. El ayuntamiento luso y la empresa que adquirió los terrenos, asegura, agilizarán los plazos para completar la urbanización del recinto: «La mayor parte ya está hecha y faltan intervenciones de menor dimensión»
La zona industrial de 56 hectáreas de superficie abarca las parroquias de Pinheiros, Lara, Mazedo y Troporiz. Barbosa no dio nombres, pero aseguró que «ya hay empresas de tamaño interesadas» en instalarse. Consultado sobre la cantidad de empleos que se podrían generar en esa infraestructura, como resultado de la inversión privada y sin apoyo de fondos comunitarios, dice que todavía es «difícil y prematuro» hacer una estimación. «En el 2009, cuando Aiminho anunció esta inversión, apuntaba a la creación de 1.200 puestos de trabajo. De momento, dada la alteración del proyecto inicial, que ya no requiere una obligación en relación con las empresas que se constituirán, es impredecible cuántos puestos de trabajo creará, pero estamos hablando de muchos, muchos cientos de personas», señala el regidor.
Los antiguos promotores preveían una inversión de 20 millones de euros para la instalación de un centenar de compañías dentro de este parque estratégico por la conexión con Galicia a través de la Plisan.
Polígonos agotados
El éxito de ocupación que durante décadas se ha conseguido en los polígonos fronterizos de Vilanova de Cerveira y Valença (donde más la mitad de las empresas instaladas son gallegas), entre otros, es una garantía de inversión. Según los datos de la AECT de Galicia y el Norte de Portugal, hay casi 7.000 trabajadores gallegos, la mayoría de Vigo y del resto de la provincia de Pontevedra que cruzan a diario el río Miño porque sus empresas se han ampliado o han trasladado su actividad a suelo luso. La industria auxiliar de la automoción y los congelados son sectores que continúan de forma imparable su expansión en el norte de Portugal.