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Portugal testa los primeros radares de velocidad media en todo el país

Monica Torres
m. torres VALENÇA / LA VOZ

VIGO

cedida

Estarán identificados con la señal H42 y miden el tiempo mínimo por tramo

04 may 2023 . Actualizado a las 00:45 h.

Quienes vayan a circular por Portugal pueden encontrarse en breve con una señal de tráfico nueva en el país vecino. Se denomina H42 y, aunque de momento solo se está testando, advierte de los radares de velocidad media que se instalarán en las carreteras lusas. Se trata de los temidos radares de tramo que, curiosamente, Francia planea quitar ya y de los que hay un centenar en España. En la provincia se estrenaron en el 2018 con el que está en la AP-9 entre Teis y Peinador y que incluye los túneles de A Madroa y Candeán. Es el único que hay en Pontevedra.

A diferencia de los convencionales, que miden la velocidad instantánea de cada vehículo en un punto fijo sancionando a los conductores que sobrepasen el límite establecido, estos controlan el tiempo de recorrido en un tramo de varios kilómetros y la multa es para quienes lo completen antes del mínimo permitido. Las cámaras comprueban el tiempo empleado para ir desde el inicio hasta el final del tramo y calculan la velocidad media a la que se ha recorrido la distancia en cuestión. La señal portuguesa es muy visual y advierte de la presencia de uno de estos radares con dos cámaras y objetivo sobre fondo azul. Ya pueden encontrarse en algunos puntos de la red lusa de carreteras, aunque aún están en fase de testarse. Según ha avanzado la Autoridade Nacional de Segurança Rodoviaria (ANSR), los primeros diez radares de este tipo se ubicarán en una veintena de localizaciones alternativas y una de ellas es la autopista más utilizada por los gallegos que acuden a Portugal. Uno de los radares de velocidad media estará en la A-3 en Oporto y los demás se distribuyen por autopistas autovías y carreteras identificadas como IP (itinerario prioritario), IC (itinerario complementario) o EN (carretera nacional) del centro y del sur del país.

Estarán en Coímbra, entre la A-1 y la EN-109, en Évora, en la A-6 y en la IP-2, y en Santarém, en la A-1. Lisboa tendrá hasta cuatro posibles ubicaciones (la A-9, la EN-10, la EN-6-7 y la IC-19) mientras que los controles en Setúbal serán en la EN-10, la EN-378, la EN-4 y la IC-1. Más al sur, en Beja, que es la capital del Bajo Alentejo, al norte de Faro, habrá control en la IC-1.

La Autoridade Nacional de Segurança Rodoviaria avanza que divulgará a través de una web dónde se van a instalar estos mecanismos de control y alerta. El procedimiento será similar al que hace la PSP (Policía de Segurança Pública), que informa periódicamente de la fecha, hora y ubicación en la que van a instalar sus cinemómetros cada mes, bajo la premisa de «Quien avisa...». La finalidad y recomendación es en ambos casos la misma y los nuevos radares de velocidad media pretenden persuadir también a los conductores que solo levantan el pie del acelerador ante el punto de control fijo. «Las localizaciones se han seleccionado atendiendo a los índices de siniestralidad y los accidentes provocados por los excesos de velocidad», explicaron fuentes de la ANSR. Tanto los siniestros como las sanciones son para todos. Las multas de velocidad también llegan a España y, aunque es difícil recaudarlas por vía ejecutiva, los infractores que no las paguen se enfrentan a tener que hacerlo al momento si los para la GNR y no caducan al año.