Un espectacular arcoíris bajo las aguas de las islas Cíes

Alejandra Pascual Santiago
alejandra pascual VIGO / LA VOZ

VIGO

Un nudibranquio de colores azul y amarillo en el fondo de las islas Cíes.
Un nudibranquio de colores azul y amarillo en el fondo de las islas Cíes. JOSE IRISARRI

Los nudibranquios, que se reproducen por primavera, se tiñen de colores llamativos para alertar de su toxicidad a posibles depredadores

20 may 2023 . Actualizado a las 19:14 h.

El color de los nudibranquios no es una casualidad de la naturaleza. Estos pequeños moluscos, que suelen carecer de concha y tener sus branquias al desnudo, están teñidos de tonalidades vistosas para alertar de su toxicidad a posibles depredadores. Protagonizan un llamativo espectáculo bajo las aguas de las islas Cíes que se vuelve más intenso en primavera y verano, coincidiendo con su etapa de reproducción sexual.

El documentalista José Irisarri ha filmado un buen número de nudibranquios en la zona de máxima protección de Galicia, a unos diez metros de profundidad. La pintoresca imagen que estos organismos dibujan en el fondo marino del Parque Nacional de las Islas Atlánticas tiene que ver con su menudo tamaño y su lentitud. «Ser pequeño en el mundo animal no es la mejor de las apuestas. Esta presión evolutiva provoca que los nudibranquios hayan desarrollado diferentes mecanismos de defensa», indican los asesores científicos del vídeo, Álvaro Roura, Jesús Troncoso y Gonzalo Mucientes. Miden entre milímetros y escasos centímetros. La más brillante de sus respuestas es su coloración. «Avisan de que son un mal bocado», resume Troncoso, profesor de Zoología Marina de la Universidad de Vigo. «El ser humano es un animal estético», añade.

Otras especies, sin embargo, tienen una llamativa tonalidad críptica: se mimetizan con la paleta de colores del fondo marino en el que reposan o con el aspecto de sus depredadores. Este proceso se conoce como cripsis. «Algunos incluso viven encima de su comida», cuenta Troncoso. Precisa que los nudibranquios experimentan una metamorfosis en lo relativo a su aspecto «cuando salen al exterior» y superan la fase larvaria, pero ya nacen con un color determinado. Sus órganos sensoriales son dos y están en su cabeza: los rinóforos.

Otro mecanismo de defensa de estos organismos son las protuberancias de su cuerpo, conocidas como ceratas. Están cargadas de toxinas y almacenan las células urticantes que atacan a sus presas. «En una ocasión, estaba recogiendo un nudibranquio de color azul para su estudio. Cuando lo iba a reposar sobre una bolsa, apareció una maragota y, así como se lo comió, lo escupió. Fue inmediato», relata el profesor de Zoología sobre la secreción de sustancias venenosas que son capaces de generar.

En la imagen se muestran, en color amarillo, las ceratas de los nudibranquios.
En la imagen se muestran, en color amarillo, las ceratas de los nudibranquios. JOSE IRISARRI

Algunas especies de nudibranquios son capaces de digerir otras sustancias vetadas para el resto de habitantes del fondo marino. «Los aeólidos», por ejemplo, «van un paso más allá», señalan los impulsores de este filme en alta calidad. Reciclan las células urticantes de cnidarios que les sirven como alimento y son capaces de transportar estas células dañinas «hasta las ceratas para usarlas como mecanismo disuasorios».

«Como no tienen concha, estos organismos desarrollan estrategias de protección de cierta complejidad», indica Troncoso. La sofisticada forma de reaccionar ante posibles amenazas despierta el interés de muchos investigadores marinos, independientemente de su especialidad. De hecho, la industria farmacológica también dedica esfuerzos a la investigación de esta especie porque parte de las sustancias que segregan se emplean en la fabricación de medicamentos y productos farmacéuticos. Entre otras cosas, se estudia su sistema nervioso para entender mejor los mecanismos del aprendizaje y la memoria.

El ciclo de vida de las que también se conocen como las mariposas del mar es relativamente corto y difícilmente supera los doce meses. Otra característica llamativa de estas notas de color, que conforman un especial arcoíris en el fondo del mar, es que son hermafroditas simultáneos. «Es decir, poseen al mismo tiempo órganos sexuales funcionales masculinos y femeninos. Esto supone una gran ventaja para la reproducción ya que maximiza el número de cópulas y el intercambio sexual», cuentan los investigadores. Pueden poner cientos de huevas y tienen formas extravagantes.