Una incidencia eléctrica afectó a los servidores y mantuvo a los profesionales sanitarios gallegos sin acceso a las hitorias clínicas toda la tarde y parte de la noche; según Sanidade, «ningún paciente quedou sen atender»
15 nov 2023 . Actualizado a las 08:46 h.Los servidores del Servizo Galego de Saúde han vuelto a funcionar. Después de que los profesionales sanitarios gallegos tuviesen que trabajar casi toda la tarde del martes sin acceso al sistema informático, la luz ha vuelto. La Consellería de Sanidade da oficialmente por superada la incidencia desde esta mañana y los médicos tienen acceso a la historia clínica electrónica, los farmacéuticos a las recetas y los pacientes a la aplicación de citas.
La caída del sistema se produjo sobre las seis de la tarde, según profesionales que estaban trabajando y que, repentinamente, fueron incapaces de acceder. Según fuentes oficiales, se debió a un gran pico de la tensión eléctrica que afectó directamente al centro de procesamiento de datos, ubicado en Santiago, que alberga los servidores de la sanidad pública. El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, ha dicho este mediodía en A Coruña que todo se debió a «unha serie de coincidencias» que provocó una caída de los equipos. Ha asegurado que se empezó a recuperar una parte de la actividad en torno a las diez de la noche y que esta mañana ya se daba por superado, si bien todavía había algunas incidencias, como que la aplicación Sergas Móbil no funcionaba.
Como todo coincidió por la tarde, había menos actividad ordinaria de consultas. Pero muchos centros de salud sí la tenían. Además, estaban las personas ingresadas en los hospitales, las urgencias, los puntos de vacunación masiva que administran las inyecciones contra la gripe y contra el coronavirus, y también las oficinas de farmacia, a las que se remiten las recetas por la vía electrónica. La tarde fue muy complicada para los sanitarios, porque todo funciona de manera electrónica. Los médicos no tienen acceso a pruebas de radiología ni de laboratorio si no es por el ordenador, tampoco pueden consultar el historial clínico del paciente que tienen delante o los medicamentos que está consumiendo. Pero además, tampoco pueden pedir pruebas a sus compañeros, conque la actividad en los laboratorios de los hospitales se redujo y las peticiones tuvieron que hacerse en papel. Este elemento escrito, que ha ido desapareciendo de los hospitales, se echó de menos ayer.
Al mismo tiempo, la relación de los pacientes con el sistema sanitario es cada vez más electrónica. Ayer no se podía pedir cita a través de la web o de la app oficiales. Pero en los centros de salud tampoco podían apuntarlas en el sistema aunque se solicitase de forma presencial o telefónica. Incluso en los puntos de vacunación masiva, las enfermeras tuvieron que ir anotando a mano todas las vacunas que administraban para, ahora que se ha recuperado el sistema, incorporar la información a la historia clínica.
«A informática é unha aliada, pero tamén somos un pouco esclavos dela», ha reconocido el conselleiro Comesaña. El plan de contingencia que activó el Sergas ante la caída de los equipos fue, precisamente, volver al papel.
Esta mañana, ya con toda la actividad ordinaria en los hospitales y centros de salud, en consultas, pruebas y quirófano, y con todas las farmacias abiertas, se ha recuperado la normalidad. Ayer por la tarde se temía que no se pudiera llegar a tiempo.
«En cuanto se produjo la caída, nos pusimos en contacto con los directivos de guardia de todas las áreas sanitarias a través de los gerentes y se activaron los planes de contingencia. También contactamos con los colegios oficiales de farmacéuticos», explican fuentes oficiales de la Consellería de Sanidade.
Ahora toca la evaluación de daños. La consellería analiza este miércoles que ha ocurrido. Según Julio García Comesaña, «non houbo incidencias importantes, ningún paciente foise sen atender».