Avalan que un separado de Tui pague solo 135 euros de pensión a su hija porque trabaja en Portugal
VIGO

La Audiencia admite que el hombre vive en precariedad porque «es sabido que en este país no ha lugar a elegir empleo»
30 dic 2023 . Actualizado a las 16:06 h.La Audiencia en Vigo ha dado la razón a un trabajador transfronterizo de O Baixo Miño que rompió con su novia y que cobra 850 euros al mes. La madre de su hija no matrimonial le reclamó que, en vez de pagar 135 euros de pensión, abonase 150 a la niña, a lo que él se opuso porque gasta 70 en gasolina al mes para viajar a diario a su trabajo en Portugal. La Audiencia, en una sentencia del 6 de octubre, admite que, «en este país, no se puede elegir trabajo» y mantiene los 135.
Todo empezó cuando el Juzgado de Primera Instancia número 5 de Vigo (Familia 1) concedió en el 2022 a la madre la guarda y custodia y ordenó al padre satisfacer 135 euros mensuales en concepto de alimentos a favor de su hija menor. La magistrada justificó la escasa pensión porque, en el caso del padre, «es obvio que no nos hallamos ante un escenario de pobreza absoluta, pero sí de precariedad». Por otra parte, la niña no tenía gastos especiales porque no iba a la guardería en esas fechas, y la madre era una parada que reside en casa de sus padres con su hija y que percibe la ayuda pública del bono Benvida por su hija de 600 euros al año.
La progenitora apeló a la Audiencia porque consideraba que 150 o 200 euros era el mínimo vital para cubrir las necesidades de un menor. Se quejó de que el otro progenitor hubiese escogido Portugal, y no España, como lugar de trabajo y veía como una falta de equidad y justicia hacia su hija que a otro hijo, de otra relación anterior, le ingresase 170 euros.
El hombre replicó que no tenía inconveniente en cambiar de trabajo para España, siempre que lo encontrase, y que no tuvo otra opción a raíz de la pandemia. Propuso que su expareja solicitase ayudas como el Risga.
La Sexta Sección de la Audiencia Provincial le da razón al padre, que trabaja en Vilanova da Cerveira, porque «es sabido el problema laboral que sufrimos en este país en el que no ha lugar a elegir lo que y dónde se desea». Además, él paga dos pensiones de alimentos a dos hijos, cada uno de distinta madre.